Un sorprendente descubrimiento de ha llevado a cabo en las proximidades de Praga, capital de la República Checa, con lo que parece ser una estructura de la Edad de Piedra con más antigüedad que las Pirámides de Egipto o el monumento megalítico de Stonehenge.
«Redondel de Praga»
La importancia del hallazgo es muy grande pues nos estaría hablando de una cultura asentada en la zona, avanzada, y que habría construido el denominado como «Redondel de Praga» con unas dimensiones colosales, nada menos que 55 metros de diámetro.
Se calcula que data de hace unos 7000 años y se encuadraría en el Neolítico tardío o en la Nueva Edad de Piedra siendo estos los «constructores» de este círculo y del que se desconoce la función del mismo.
Jaroslav Ridky, del Instituto de Arqueología de la Academia Checa de Ciencias (IAP) indicaba que es pronto para saber quién lo construyó y su finalidad pero era una cultura de la cerámica asentada en la zona hacia el 5000 a.C.-4500 a.C. El circulo de Vinor era conocido desde 1980 cuando unos trabajadores dieron con los vestigios del mismo, pero ha sido ahora cuando se ha descubierto la estructura -en su totalidad- por primera vez.
Pistas sobre la antigüedad
Miroslav Kraus, director de la excavación, decía que esta estructura y los restos hallados podrían dar pistas sobre la antigüedad de la misma pues se han hallado restos de cerámica ornamentada, huesos de animales y herramientas de la época en piedra, la datación de los restos orgánicos ofrecerán luz sobre todo ello.
Cabe destacar que en el año 1991 se descubrió, en Alemania, el llamado «Círculo de Goseck», con un diámetro de 75 metros y doble empalizada en madera y tres accesos. Estaban orientadas dos al amanecer y una al atardecer en relación a lo solsticios de invierno y de verano, por lo que podrían ser una suerte de observatorios.
Sobre este «Redondel de Praga» se indica que «los círculos probablemente combinaron varias funciones, siendo la más importante la socio-ritual».
La República Checa concentra el 25% de los círculos hallados hasta ahora en Centroeuropa allá donde persiste el misterio de quienes fueron sus constructores.