Cádiz tiene una gran multitud de lugares cargados de Historia y de referencias culturales de la Antigüedad. Es una ciudad que tiene milenios, desde su creación, y en cuyo subsuelo descansan los restos de culturas tan importantes y trascendentes como la fenicia, cartaginesa o romana, entre otras. En ocasiones, en esos mismos lugares también se pueden producir hechos que escapan de toda lógica.
Testimonio directo
Una de esas experiencias extrañas es la que Ángel Gómez tuvo en un entorno tan especial como es la «Casa del Obispo», un yacimiento arqueológico de una gran importancia y que es referencia para la Historia y los arqueólogos de toda España. Un punto del que se han obtenido datos e información muy relevante sobre el pasado de la ciudad.
De fenómenos paranormales, o inexplicables, en su interior se sabe desde hace años y del que hemos informado en CÁDIZDIRECTO así como otros medios de comunicación en prensa, radio o televisión a nivel local o nacional. Desde este entorno se realizó una investigación, dentro del programa «Cuarto Milenio», con la colaboración de Manuel Pimentel, y donde se trataba de dilucidar si todas esas historias que se narraban eran reales o no. Una investigación que reabrió un debate así como la polémica en torno al mantenimiento y cuidado del yacimiento.
Pero nuestro testigo vino a vivir «algo» que «me rompió los esquemas», como él me indicaba. «Mira, tengo 68 años y fue de visita hace un tiempo, con mi señora, su hermana y mi cuñado a Cádiz. Tenía mucho interés mi cuñado en ir a la «Casa del Obispo» y como íbamos a estar unos días pues oye, sin problemas. El caso es que entramos allí, que está muy bien, con las pasarelas y los paneles y vimos todo el yacimiento, estábamos solos, no había más visitantes ni turistas».
Visión muy clara
«En un momento dado mi cuñada dijo: «Uy, y ese hombre, ¿qué hace ahí?» y mi cuñado le dijo: «igual es un figurante o algo, alguien que han puesto ahí para ambientar esto como si viviera en esa época, con las ropas y eso», y ella asintió con la cabeza diciendo: «eso debe ser», pero era muy extraño» explicaba Ángel.
Me llamó la atención su forma de contarlo y quise ahondar en todo ello: «¿Qué os llamó la atención?¿Tu lo viste? ¿Cómo iba vestido?» y él me dijo: «Lo vi como te estoy viendo ahora mismo a ti, vamos, perfectamente. Era extraño por que era un hombre con barba, de unos 30 o 34 años, no sé, era fortote y vestía como una especie de túnica de color naranja o en tono ocre claro, vamos que parecía un actor allí abajo».
Abandonaron el lugar no sin antes mirar de nuevo a donde habían visto a ese hombre y «ya no había nadie», era como si se hubiera esfumado. Yo no quise comentar nada a la gente de allí pero al llegar al hotel busqué información y vi que pasaban muchas cosas en la «Casa del Obispo» y por eso, cuando ya me he decidido, pues de esto ya hace algún tiempo, me animado a contártelo».
En muchas ocasiones este tipo de lugares conlleva presencias que no logramos entender, el caso de Ángel pone sobre la mesa este tipo de fenómeno que ya se han vivido en otros puntos cargados de Historia como, por ejemplo, el Castillo de San Sebastián o en otros lugares ajenos a Cádiz como el Museo Reina Sofía en Madrid, antiguo hospital de San Carlos, donde aparecen monjas o en los Reales Alcázares de Sevilla donde es «normal» los comentarios de «actores vestidos de época» que no existen.
Hechos paranormales que, una vez más se producen en un entorno mágico como la «Casa del Obispo».