¿Podría llegar un nuevo Diluvio Universal?

Actualizado:

Hay tragedias que han quedado grabadas, para siempre, en la Historia de la Humanidad como bien pudiera ser el Diluvio Universal que no sólo narra la Biblia sino que está presente en las tradiciones religiosas de muchas culturas que hablan de un cataclismo que vino en forma de incesantes lluvias e inundaciones, algo cuyos efectos los podemos vivir hoy, a pequeña escala, en muchas partes del mundo y comprobamos la violencia de las aguas y su fuerza.

No es algo para tomar a la ligera pues la prestigiosa revista Nature ha publicado un informe en el que se vaticina como serán las lluvias en el futuro, vaticinio que se sustenta sobre estudios científicos que tienen más de realidad que de ficción.

Proyecto INCUS

Así en el mismo de habla de la incidencia que tiene el cambio climático en nuestro planeta, en el aumento de la temperatura en los océanos y en la probabilidad -cada vez más alta- que se intensifiquen esas lluvias y sean cada vez más frecuentes y rápidas.

La propia NASA lleva analizando el fenómeno varios años y se ha creado una misión especial denominada como INCUS (Investigation of Convective Updrafts) que, para 2027, debe investigar con profusión las tormentas extremas y la relación que tiene con el calentamiento global, todo ello encuadrado dentro del programa Earth Venture.

Thomas Zurbuchen, administrador asociado de la Dirección de Misiones Científicas de la agencia en Washington decía al respecto: «Cada una de nuestras misiones científicas de la Tierra se elige cuidadosamente para agregar a una sólida cartera de investigaciones sobre el planeta en el que vivimos. INCUS llena un nicho importante para ayudarnos a comprender el clima extremo y su impacto en los modelos climáticos, todo lo cual sirve para proporcionar información crucial necesaria para mitigar los efectos del clima en nuestras comunidades».

El proyecto INCUS tiene la meta de analizar la razón por las que surgen las tormentas convectivas, las fortísimas precipitaciones y la formación de nubes. Así las tormentas se inician con un veloz aumento de lo que es el vapor de agua (luego lluvia) y aire que crean unas nubes muy altas que originarán la lluvia, el granizo y el aparato eléctrico (rayos y demás).

A mayor masa del vapor de agua y aire que se transporta hacia arriba en nuestra atmósfera será mayor el riesgo de las condiciones extremas a nivel meteorológico. Todo esto da lugar a que de lluvias más estables se pasaría a otras cortas pero de mucha intensidad lo que daría origen a: «flujos de precipitación locales fuertemente mejorados, un aumento sustancial de la cobertura de nubes y un parámetro de retroalimentación climática transitoriamente positivo».

Cómo llegará el Diluvio

Esto se traduce en poder estar sin llover días, semanas, a producirse lluvias torrenciales o diluvios con grandísimas cantidades de agua con el peligro que ello conlleva.

Aunque también se reconoce que es complicado ir vaticinando los modelos meteorológicos «las mediciones sistemáticas de CMF en toda la gama de condiciones mejorarían la representación de la intensidad de las tormentas y limitarían la retroalimentación de nubes altas, que pueden agregar incertidumbre, en los modelos meteorológicos y climáticos».

Cuando se habla de Diluvio se recuerda aquella epopeya bíblica en la que Noé, a bordo de su arca, con parejas de todos los animales, estuvo «vagando» 40 días y 40 noches hasta llegar al Monte Ararat en el que, previamente, una paloma había regresado con una ramita de olivo en su pico (hoy símbolo de la paz). Dista mucho de esa visión de la Biblia de nuestro mundo real pero el fondo, las inundaciones y la tragedia, es la misma.

La misión tendrá un presupuesto de 177 millones de dólares sin contar el gato por el lanzamiento siendo la investigadora principal del INCUS Susan Van den Heever.