Si viajamos a la localidad gaditana de Bornos podremos encontrar un lugar tan maravilloso como especial, se trata del «Jardín de los Suspiros» ubicado en el Castillo de los Riberas, un lugar que esconde una apasionante simbología secreta.
Fue construido por orden de Don Per Afán de Ribera en el Palacio de los Riberas en el año 1569, el llamado «giardino segreto» muy del gusto renacentista. Para engalanarlo llevó estatuas, medallas, figuras, fuentes, jaspes, mármoles procedentes de Nápoles y otros lugares, de una gran riqueza y vistosidad. Fue obra del arquitecto-ingeniero Benvenuto Tortello, el escultor Julián Meniquini y el jardinero Salvador Sepadano.
La Logia italiana de “Las Cuevecitas del Castillo” fue creada teniendo como elemento arquitectónico destacado el estilo pompeyano que es único en Andalucía; la Logia era una galería de arte con una bella colección de estatuas italianas que hoy se pueden admirar en la Casa de Pilatos de Sevilla.
Pero lo importantes es que el «Jardín de los Suspiros» esconde un mensaje donde poder encontrarte a ti mismo y a tu «yo» interior, una puerta a un mundo de conocimiento oculto, de conocimiento al mundo esotérico, a la Alquimia, a la filosofía, a la piedra filosofal, donde todos los elementos del mismo tienen una relación y un significado.
Logias y la Logia
Si desciframos su significado nos encontramos qué está rodeado por cuatro caminos, representa a los cuatro elementos, también es símbolo del tetragrama divino del nombre de Yahveh, un opus, un principio y un final. Las estatuas y las fuentes son de clara inspiración romana y griega muy de características análogas a las usadas en las logias masónicas y que pudieran tener una conexión con la familia Ribera como Sociedad de la Niebla o la logia «Fraternidad nº 13», constituida el 21 de diciembre de 1879, presente en Bornos y surgida bajo la Obediencia de la Confederación Masónica del Congreso de Sevilla.
Dentro del conjunto arquitectónico y escultórico de la Logia aparecen gárgolas que es el acceso al lado más oscuro, el más oculto así como una portada de estilo gótico tardío con un friso en el que destacan sus leones, animales míticos y hojas de acacia. Sobre el dintel dos pajes arrodillados con la corona ducal de la familia Rivera.
Un bello rincón de la provincia de Cádiz donde la Naturaleza se funde con el misterio y la simbología, un lugar que se debe visitar y desvelar más misterios que, seguro, permanecen ocultos.