El detenido por matar con un machete a un sacristán en el exterior de la iglesia de Nuestra Señora de La Palma de Algeciras es un hombre de nacionalidad marroquí, según han informado a Europa Press fuentes policiales. La Audiencia Nacional ha abierto una investigación por delitos de terrorismo.
Los hechos se han iniciado pasadas las 19.00 horas de este miércoles cuando este hombre ha entrado en la iglesia de San Isidro de Algeciras. Armado con un machete, ha atacado al cura, dejándolo gravemente herido.
Según ha confirmado el Ministerio del Interior, posteriormente ha accedido a otra iglesia, la de Nuestra Señora de La Palma en la que, tras causar diversos destrozos, ha atacado al sacristán. El sacristán ha logrado salir de la iglesia pero ha sido alcanzado por el atacante en el exterior, donde le ha causado heridas mortales.
Instantes después, el individuo ha sido neutralizado y detenido, siendo llevado a dependencias de la Policía Nacional. La investigación por delitos de terrorismo ha recaído en el Juzgado Central de Instrucción Número 6, que es el que estaba de guardia, según han confirmado fuentes jurídicas.
La Conferencia Episcopal Española (CEE) ha mostrado este miércoles su «cercanía y afecto» a los familiares de las víctimas tras el ataque a varias iglesias en Algeciras, que ha dejado al menos un muerto, el sacristán de uno de los templos, y varios heridos, entre ellos, un sacerdote, y ha condenado de manera firme «toda forma de violencia, que no puede tener lugar en la sociedad en la que vivimos.
El secretario general de la CEE, Francisco César García Magán, ha expresado previamente su «dolor» por el presunto ataque terrorista en la localidad gaditana. «Con dolor he recibido la noticia de los acontecimientos en Algeciras. En estos momentos tristes de sufrimiento, nos unimos al dolor de la familia de las víctimas y de la diócesis gaditana y pedimos al Dios de la vida y de la paz, por la pronta recuperación de los heridos», ha señalado García Magán en un tuit, recogido por Europa Press.
En un comunicado, la CEE ha querido mostrar «su cercanía y afecto y el consuelo de la fe a los familiares de las víctimas, a la diócesis de Cádiz y a la sociedad del Campo de Gibraltar» y ha expresado la «firme condena» de «toda forma de violencia, que no puede tener lugar en la sociedad en la que vivimos».
«Como creyentes, pedimos al Dios de la misericordia y de la paz que llene de esperanza los corazones de las víctimas y sane los heridos, acompañe a la Iglesia y a la sociedad en la búsqueda de la paz y convierta el corazón de las personas violentas», han pedido los obispos españoles.
En el ataque ha muerto el sacristán de la Iglesia de la Palma y ha resultado herido el cura de la Iglesia de San Isidro de Algeciras. El atacante habría irrumpido en el templo con un machete.
La agresión se ha producido alrededor de las 19.30 horas y los alertantes informaban en los avisos de ataques en diferentes iglesias.