/Es básicamente aroma, que penetra por nuestras fosas nasales, que es capaz de colorear con su olor el agua que lo contiene y hasta darle un sabor que, pocas veces, tiene. Se trata del té y si es de los que gusta tomar una taza de este líquido sabrá apreciar las muchas curiosidades que tiene.
Apreciado en el Reino Unido, sólo, con unas «gotitas» de leche, con limón, frío… Cualquier forma de prepararlo es bueno si se consume. Pero hay particularidades del té que seguro que le van a resultar de lo más curioso:
Hay muchas variedades de té, todos tiene un consumidor y alguien que tiene especial gusto por él, pero hay uno que por mucho que nos pueda gustar puede que no esté a nuestro alcance. Se trata del Da Hong Pao que cuesta la friolera de un millón de dólares por kilo, es el mejor té del mundo y el más costoso pues se cultiva en plenas montañas de Quang Ho en China. Todo un lujo para el paladar.
En tiempos de la Inglaterra victoriana era tal el gusto que se tenía por el té que se disponían de tazas especialmente para beberlo, eran tan particulares que tenía unas partes especiales que protegían el bigote para que entrara en la misma y se inundara de la bebida. Estas tazas fueron diseñadas por un alfarero en 1860, Brittish Harvey Adams, en plena moda de lucir bigote y beber té.
Es poco conocido que el beber té reduce considerablemente lo que supone el riesgo de morir por razones cardiovasculares, se ha calculado que se minimiza en un 24%. Nicolas Danchin, científico francés, investigaba si es mejor morir por consumo de té o de café, si podemos elegir mejor que sea por té…
Beber té verde antes de dormir hace que se quemen calorías mientras descansamos y se incremente el metabolismo en un 10%.
Uno de los países con mayor consumo de té del mundo es el Reino Unido, al día se ha estimado que se beben más de 165 millones de tazas lo que supone que se tiene un consumo de 62.000 millones de tazas al año. Pero no no crean que es donde más té se consume, sería un error pensar así, pues el consumidor del mundo es el gigante asiático, es China. Eso en cuanto a cifras brutas de consumo. Si analizamos lo mismo pero por persona nos encontramos en una situación diferentes pues las tres primeras posiciones la ocuparán Turquía, Irlanda y el Reino Unido, ello suben al cajón de los «más amantes» de esta bebida.
Después del agua y el té, en igual posición que el café, es la bebida más tomada del mundo.
Una de las imágenes más particulares del té es su bolsita de papel que contiene la selección del mismo. Es curioso pues la invención de estas «bolsas contenedoras» se debió a un accidente, lo que se llamaría como una «serendipia» o suceso fortuito. Inicialmente se desechaban las bolsas antes de usarlas, ese era el objeto, pero al comercializarlas nadie lo especificó por lo que se creyó que eran parte de como debía emplearse, así todo el mundo comenzó a sumergirlas en el agua caliente. Fue el norteamericano Thomas Sullivan fue el que envió muestras de té a sus clientes en pequeñas bolsas de seda. El resultado que él esperaba era que el cliente vaciara el contenido para añadir en la taza pero estos no lo sabían y así se dio paso a la nueva Era del té, que ha facilitado y popularizado su consumo.
El té puede servir para otras muchas cosas. Seguro que ha escuchado alguna vez aquello de «tus pies huelen a queso», si es así el olor en los zapatos será igualmente desagradable pero hay un remedio casero muy eficaz, se trata de introducir en el interior de los mismos unas bolsas de té secas y se encargarán de absorber el olor que tienen, igualmente se usa para aliviar el dolor que nos puede causar las quemaduras provocadas por el sol o el malestar de un «bronceado» acelerado.
Si quieres tener el cabello más limpio, brillante y manejable sólo tienes que hacer algo: enjuaga -después de lavártelo como normalmente lo haces- el pelo con una taza de té, notarás su efecto de inmediato.
El té tiene sustancias que pueden acelerar a la persona, se trata de la teína que, realmente es cafeína -por muy raro que resulte y hay estudios sobre ello-; así el café también lo tiene. Existe el «té descafeinado» que elimina esta sustancia en un 97%.
Tal vez habrá notado que hay personas que cuando beben suben el dedo meñique, a eso se le llama «la regla del meñique hacia fuera», muy común cuando se consume té, pues es debido a la sífilis -una enfermedad de transmisión sexual que puede llevar a la muerte a la persona, en casos extremos y sin tratar- pues uno de los síntomas era el daño en las articulaciones de los dedos. Era una época en la que esta enfermedad eran común y se delataba en la toma del té.
Igualmente es un excelente recuperador facial, un buen tónico que ayuda a que la piel está menos grasa.
De entre todas las variedades de té que hay nos encontramos que, se cualquier forma, todas brotan de la misma planta, de la Camellia sinensis. Todas las diferencias, en cuanto a su color y su sabor, dependerán de como se traten las hojas del mismo que es de donde se extrae.
Entre las categorías del té que se pueden encontrar e debe reducir todo a 6 que serían las siguientes:
1º.- Té blanco.
2º.- Té amarillo.
3º.- Té verde.
4º.- Té Oolong.
5º.- Té negro, al que los chinos prefieren llamarlo «té rojo».
6º.- Té post-fermentado.
El té es aconsejado para limpiar y dar lustre, y brillo, a los muebles y otros elementos de madera que podemos encontrar en el hogar, en cualquier casa.
Son las curiosidades de una bebida tan apreciada y buena para la salud como es el té, ya no hay excusas para no disfrutar de una buena taza.