
El Cádiz CF cierra el curso en casa ante la SD Huesca, con más presión en la grada que en el campo
El equipo amarillo ya no se juega nada en lo deportivo ante un rival que pelea por entrar en fase de ascenso

El Cádiz CF jugará su último partido de la temporada 2024/2025 en el Nuevo Mirandilla este domingo 26 de mayo a las 18:30 horas ante la SD Huesca en una ambiente enrarecido por lo extradeportivo y por las protestas convocadas por parte de la afición.
Será un choque, por tanto en el que los amarillos tendrán más presión en la grada que en el terreno de juego. En frente, un rival que llega a Cádiz jugándose sus opciones de poder meterse en la fase de ascenso a primera división.
Es por tanto un partido que no tiene valor clasificatorio para el Cádiz CF, pero sí lo tiene, y mucho, para su rival, la SD Huesca. Para los de Gaizka Garitano, el objetivo pasa por ofrecer una imagen profesional y digna ante una afición cada vez más alejada del proyecto institucional y deportivo del club.
El choque será además uno de los marcados en rojo por la hinchada, aunque no por razones estrictamente futbolísticas. La fractura con la directiva y el malestar creciente en la grada condicionarán el ambiente en un duelo que se jugará con las protestas como telón de fondo y con el posible récord negativo de asistencia del curso.
El partido servirá como termómetro del distanciamiento entre la afición y el palco. Esta semana, la Federación de Peñas del Cádiz CF alertó de la creciente desconexión de la afición con el club y con los propios jugadores. Y de nuevo, el colectivo Brigadas Amarillas ha convocado una protesta: permanecerán fuera del estadio durante toda la primera parte, accediendo solo tras el descanso como símbolo de rechazo a la gestión de Manuel Vizcaíno y Rafael Contreras.
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— Brigadas Amarillas (@BA1982Oficial) May 23, 2025
Cierre de año sin objetivos, pero con mucho que demostrar
En lo deportivo, el Cádiz CF llega al partido matemáticamente salvado tras una temporada decepcionante, tras el descenso del año anterior y un proyecto que nunca llegó a despegar. La llegada de Garitano aportó esperanza en la fase intermedia del campeonato, pero la pésima racha final (dos victorias en los últimos nueve partidos con ocho puntos de 27) ha hecho que el equipo se despida del curso por la puerta de atrás. La derrota de la última jornada ante un descendido Racing de Ferrol (1-0) confirmó el nivel de apatía del plantel.
“Es el último partido en casa y queremos ganar”, afirmó Garitano en rueda de prensa, consciente de la tensión del entorno. “Queremos acabar bien delante de nuestra gente. Es el mayor objetivo”, añadió el técnico vasco, que también dejó claro que su deseo es seguir en el club y comenzar un proyecto “con más sello propio”.
Para ello, quiere cerrar el año con dos triunfos, pero sobre todo con una imagen que dignifique el escudo. Sin presión deportiva, el equipo podría ofrecer minutos a jugadores menos habituales o a futbolistas que necesitan reivindicarse. Es el caso del joven Moussa Diakité, recientemente convocado por la selección de Mali, o de Chris Ramos, que apura su recuperación con la duda de si podrá disputar los que podrían ser sus últimos minutos con el Cádiz CF, ante los rumores de traspaso en verano.
En la portería repetirá José Antonio Caro, ante la baja de David Gil, recientemente operado. En defensa y mediocampo podrían producirse algunas rotaciones, incluyendo la posible entrada de Ier Recio, y también se baraja repetir parte del bloque de Ferrol pese al mal rendimiento colectivo.
El Huesca llega con opciones reales de playoff
Muy distinta es la realidad del Huesca, que aterriza en Cádiz con 61 puntos y a solo uno de los puestos de playoff. A falta de dos jornadas, los oscenses necesitan ganar en el Nuevo Mirandilla y esperar que Almería o Granada tropiecen. Para ello, deberán mejorar una dinámica reciente irregular (dos derrotas y un empate en los últimos tres encuentros), aunque siguen siendo uno de los equipos más sólidos y competitivos de la segunda vuelta.
Desde el vestuario oscense insisten en mantener la calma. “Hay que seguir empujando y que la presión la tengan los demás”, señaló Gerard Valentín, mientras que el central Diego González recalcó que el equipo debe “creer hasta el final” y que este partido puede ser clave para vivir “una tarde mágica en El Alcoraz” en la jornada final.
La SD Huesca llega con bajas importantes. No estarán por sanción Jorge Pulido, Rubén Pulido y Joaquín, además de los lesionados Dani Jiménez, Jordi Martín y Javi Mier. Aun así, el equipo mantiene su columna vertebral y se espera que salga a por todas desde el primer minuto.