Cádiz celebra hoy el Día de las Personas sin Hogar con una concentración en El Palillero
La Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (Apdha) ha llamado a participar en la concentración convocada a las 18.00 horas de hoy en la plaza del Palillero con motivo del Día de las Personas Sin Hogar. La calle no es un hogar es el lema escogido para esta movilización, en la que aprovecharán para plantear a las administraciones una serie de propuestas en defensa de este colectivo tan sumamente vulnerable y que, a su entender, son más efectivas que las políticas asistencialistas que desarrollan los poderes públicos “que solo contribuyen a perpetuar la situación de las personas sin hogar”.
“Un año más estamos a las puertas del invierno y miles de personas van a dormir en las calles y plazas de nuestras ciudades y pueblos”. Un recordatorio que, en declaraciones a Cádiz Directo, ha realizado Mamen Belizón en representación de Apdha. Como dice el lema de este año, “la calle no es un hogar, y las distintas administraciones tienen la obligación de garantizar una vivienda digna a este colectivo”.
Belizón ha señalado que “el sinhogarismo es una realidad que no supone solo la falta de alimentos, de ropa o de vivienda, sino que es un problema que menoscaba la dignidad de la persona y es una de las formas más extremas de la exclusión social”.
A juicio de Apdha, la mayoría de las políticas de atención a personas sin hogar son actualmente “meramente asistencialistas, con lo cual se perpetúa la situación de dependencia y exclusión y, por tanto, no resuelven realmente el problema”.
Andalucía, por debajo de la media en plazas
La pérdida del trabajo, de la vivienda, una ruptura de pareja, distintos tipos de adicciones y trastornos mentales son algunos de los motivos que pueden arrastrar a una persona hacia el sinhogarismo. Sin embargo, la Apdha llama la atención sobre un nuevo perfil que ha pasado a formar parte de este colectivo en España, que es el de los menores extranjeros no acompañados (MENA) que llegan al país y que, cuando cumplen la mayoría de edad, son “literalmente arrojados a la calle sin ningún tipo de recurso o de ayuda”.
Como cuenta Belizón, es “significativo” que el número de plazas para personas sin hogar está en Andalucía “muy por debajo de la media nacional”. Así, mientras que en España hay una media de 41,2 plazas por cada 100.000 habitantes, la cifra en la comunidad andaluza se sitúa “en 25 plazas por cada 100.000 habitantes”.
Medidas concretas
Desde la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía se propone una serie de medidas para hacer frente del programa del sinhogarismo que pasan, en primer lugar, por la elaboración de “un Plan Andaluz para la erradicación del Sinhogarismo realizado de forma participada por el propio colectivo y con las distintas asociaciones que lo atienden”.
Igualmente, reclaman “la remunicipalización de los servicios de atención de las personas sin hogar”, estableciendo una red pública que tenga una dotación presupuestaria suficiente, ya que “está comprobado que la privatización no da lugar a un mejor servicio, además de que es más cara”.
Otra de sus propuestas pasa por una reforma del “régimen estricto de estancia en centros municipales”, bien sean en centros de día o centros de acogida municipal como los albergues, “adaptándolos a las necesidades reales de este colectivo y a la complejidad del problema del sinhogarismo”. Además, plantean una distribución de estos recursos por los distintos barrios de la ciudad, "evitando así su concentración y posibles problemas de aporofobia”.
Por otra parte, la Apdha insta a la paralización de “todos los desahucios que no tengan una alternativa habitacional digna”, así como un aumento de los recursos para la implantación del modelo Housing First o La Vivienda Primero, que “está dando excelentes resultados en los lugares en los que se está llevando a cabo”.
Además de denunciar el “incumplimiento por parte de algunos ayuntamientos del derecho de las personas sin hogar al empadronamiento”, la Apdha ha finalizado exigiendo “voluntad política y los recursos necesarios para la atención integral y digna de las personas sin hogar” para conseguir que “nadie viva en la calle en contra de su voluntad”.