Vista elevada de un grupo de chicos peleándose en un aparcamiento.
Grupo de jóvenes pegándose a la salida de la discoteca.

Cinco menores imputados por la paliza a dos jóvenes en una discoteca de Puerto Sherry

El caso ha sido remitido a la Fiscalía de Menores de Cádiz, que será la encargada de tomar las declaraciones y valorar posibles medidas

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La Policía Nacional ha identificado a cinco menores de edad como los presuntos autores de una agresión ocurrida en la madrugada del 29 de julio en Puerto Sherry, en El Puerto.

Los hechos se produjeron a la salida de una discoteca, después de que una discusión entre dos grupos de jóvenes que acabó derivando en una violenta pelea.

Según fuentes policiales, la investigación ha permitido imputar a los cinco menores como presuntos responsables de un delito de lesiones. Ninguno de ellos tiene antecedentes.

El caso ha sido remitido a la Fiscalía de Menores de Cádiz, que será la encargada de tomar las declaraciones y valorar posibles medidas.

La pelea se originó en el interior de una discoteca, cuando dos grupos de jóvenes iniciaron una fuerte y acalorada discusión. El personal del local decidió desalojar a uno de los grupos para evitar que la situación fuera más allá. Sin embargo, el conflicto no terminaría ahí.

A la salida del segundo grupo, en los aparcamientos del recinto, los jóvenes volvieron, nuevamente, a enfrentarse. Fue entonces cuando la tensión se transformó en una agresión coordinada y muy violenta.

Dos hermanos fueron atacados siendo el primero de ellos fue rodeado por tres individuos, que lo golpearon hasta derribarlo al suelo, y continuaron la paliza mediante patadas.

La intervención de los vigilantes de seguridad evitó que la agresión continuara, pero no logró impedir que, a pocos metros, su hermano fuera igualmente golpeado de forma brutal.

Heridas de gravedad a la salida de la discoteca en Puerto Sherry

El segundo joven sufrió un fuerte golpe en la cabeza y múltiples patadas después de caer al suelo. Las lesiones obligaron a su traslado al hospital, donde permaneció ingresado por un periodo de cinco días en observación debido a un traumatismo craneoencefálico.

Su hermano, aunque con heridas menos graves, también tuvo que recibir asistencia médica y puntos de sutura por cortes y contusiones.

Ambos casos pusieron en alerta a la Policía Nacional, que desde la misma madrugada comenzó a trabajar para esclarecer lo sucedido.

Agentes de Seguridad Ciudadana acudieron de inmediato al lugar de los hechos y atendieron a las víctimas y recabando información de los testigos.

Con posterioridad el Grupo de Delincuencia Urbana de la Brigada Local de Policía Judicial se hizo cargo de la investigación.

Durante varias semanas, los agentes recopilaron pruebas y declaraciones que permitieron identificar a los presuntos agresores que todos son menores de edad y carecen de antecedentes policiales.

Los cinco han sido imputados como investigados no detenidos, una fórmula habitual en este tipo de casos cuando se trata de menores. La Policía remitió el atestado ampliatorio a la Fiscalía de Menores de Cádiz, que deberá continuar con las diligencias.

La Policía Nacional ha subrayado que este tipo de actuaciones forman parte de su compromiso con la seguridad en zonas de ocio, sobre todo en aquellas donde participan menores.

En un comunicado, la Comisaría Local de El Puerto de Santa María–Puerto Real destacó la coordinación entre Seguridad Ciudadana y Policía Judicial, que permitió actuar con inmediatez en la atención a las víctimas y en la identificación de los responsables.

También se recordó la importancia de la colaboración ciudadana para prevenir y denunciar cualquier conducta violenta.

La Policía insiste en que la participación de los testigos y la rápida comunicación con las autoridades resultan básicas para frenar situaciones como la vivida en Puerto Sherry.

La agresión ha generado una fuerte preocupación en el municipio, tanto por la violencia con la que se produjo como por el hecho de que todos los implicados son menores de edad.

Puerto Sherry es una zona de ocio muy concurrida en verano, sobre todo por jóvenes. Este tipo de sucesos reabren el debate sobre la seguridad en discotecas y espacios de recreo donde la presencia de menores -y alcohol- plantea retos adicionales para las autoridades.

La Policía Nacional, por su parte, ha reiterado su disposición a potenciar la vigilancia y a actuar con firmeza en casos de violencia juvenil.