Automóvil totalmente calcinado en San Fernando.
Coche incendiado en San Fernando.

Dos incendios de vehículos de madrugada movilizan a los bomberos en San Fernando

Bomberos, Policía Local y Policía Nacional de San Fernando coordinan la respuesta y sofocan ambos fuegos sin víctimas.

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La madrugada en San Fernando estuvo marcada por una doble intervención de los Bomberos, junto con la colaboración de la Policía Local y la Policía Nacional, tras activarse dos avisos por incendios de vehículos en distintos puntos del municipio.

Los hechos ocurrieron en la Calle San Onofre y en la Plaza Tercio de Flandes, donde dos turismos quedaron seriamente afectados por las llamas sin que se produjeran daños personales.

El operativo movilizó a cuatro efectivos del parque local, que acudieron con una autobomba urbana ligera P-40 y una autobomba urbana pesada U-36. La rápida actuación de los efectivos de bomberos evitó que los fuegos se propagaran a otros coches o elementos urbanos, un riesgo habitual en este tipo de emergencias nocturnas.

Intervenciones casi simultáneas en San Fernando

El primer incendio se registró en la Calle San Onofre, donde diferentes vecinos alertaron del intenso olor a humo y de un vehículo ardiendo en la vía pública.

A la llegada de los bomberos, el turismo presentaba un fuego desarrollado que requería de la intervención directa con agua y la protección del entorno inmediato para evitar que las llamas afectaran a otros coches estacionados.

Poco después, mientras terminaba la extinción en este punto, se recibió otro aviso, un segundo aviso desde la Plaza Tercio de Flandes. Allí otro turismo había comenzado a arder, generando una nueva salida del operativo.

Parte del equipo se desplazó rápidamente, siguiendo el protocolo para este tipo de incidencias y asegurar la zona antes de iniciar las labores de extinción.

En ambos casos, las fuerzas policiales colaboraron en el control del tráfico y la delimitación de todo el perímetro, garantizando la seguridad de los vecinos que se acercaron alertados por el sonido de las sirenas y el resplandor de las llamas.

El riesgo de propagación cuando arde un coche en un aparcamiento

Los incendios de vehículos representan un peligro elevado, sobre todo cuando se producen en zonas de aparcamiento. La proximidad entre coches y la presencia de materiales altamente inflamables —como puede ser el combustible, plásticos, gomas y aceites— favorecen que el fuego pueda propagarse con rapidez si no se actúa de inmediato.

En calles estrechas o aparcamientos con vehículos muy próximos, la temperatura que genera un coche en llamas es más que suficiente para que otro vehículo cercano pueda comenzar a arder en cuestión de minutos.

A todo ello debe sumarse de los riesgos adicionales, como la posible explosión de neumáticos o pequeños estallidos por presión acumulada.

En esta ocasión, la rápida respuesta de los bomberos evitó que ambos incendios derivaran en un episodio mayor, algo que, según explican los profesionales, puede ocurrir de forma encadenada cuando el fuego se descontrola siendo tremendamente peligroso.

La actuación coordinada entre los servicios de emergencia en San Fernando permitió controlar la situación sin incidentes personales. Tras la extinción, los equipos realizaron trabajos de enfriamiento, revisión y ventilación de la zona para descartar puntos calientes que pudieran reavivar el incendio.

Las causas de ambos fuegos no han sido aún facilitadas ni detalladas por las autoridades, que continúan recopilando información de los escenarios para completar el informe técnico de cada intervención.