El Cádiz CF se derrumba con el balón: la preocupante estadística de pases acertados de los amarillos
El equipo cadista confirma una preocupante tendencia: pierde demasiados balones y se expone en cada transición rival
El Cádiz CF sigue buscando respuestas a un desplome competitivo que ya no puede explicarse solo por los resultados recientes. Desde el 12 de octubre en el que se situó líder de LaLiga Hypermotion, con sensaciones de equipo sólido y fiable, la caída ha sido prácticamente constante. Desde entonces, el equipo de Gaizka Garitano ha perdido nueve puestos.
Hay muchas explicaciones: falta de gol, falta de contundencia en las áreas, poco aprovechamiento de las acciones a parado... Pero hay una estadistica en la que el equipo mostraba un diente de sierra en el gráfico, y se ha desplomado en las dos últimas jornadas: el acierto en el pase.
El Cádiz CF sigue cerca de los puestos de ascenso en lo numérico, pero en una categoría tan igualada como la segunda, una racha tan mala como la que lleva el equipo amarillo, le está lastrando a nivel clasificatorio. De hecho, el colista, el Zaragoza, presenta mejores números en el último mes que los amarillos (los maños suman 10 puntos de los últimos 15 disputados, por los 4 de quince de los amarillos.

La principal pregunta es por qué un equipo que parecía reconocible, compacto y difícil de batir ha empezado a resquebrajarse. Y, como siempre hay muchas explicaciones, muchas causas. Pero una razón compromete al resto del juego: el Cádiz CF ha perdido su relación con el balón, que nnca fue, precisamente íntima. Y lo ha hecho de manera sostenida, jornada tras jornada, hasta derivar en un problema estructural.
En las últimas dos jornadas, la precisión en el pase no ha alcanzado ni el 66 por ciento. Dicho de otro modo: uno de cada tres pases del Cádiz acaba mal. La frase futbolera de “no dar tres pases seguidos” deja de ser un recurso retórico y se convierte en una descripción exacta de lo que pasa en el campo. Pero lo más preocupante es que este desplome no nace ahora, sino que se viene arrastrando desde hace semanas, salvo excepciones.
En el siguiente gráfico se observa el porcentaje de acierto en los pases del Cádiz Cf en cada partido (en las columnas) y el puesto que ocupaba el equipo en la clasificación (la línea). El color verde en la columna indica la victoria, el amarillo empate y el rojo derrota.

La pérdida de precisión ha ido en paralelo a la caída clasificatoria. Cuando el equipo tenía circulación, aunque no deslumbrara, podía imponer ritmo, generar metros hacia adelante, soltar la presión rival y sostenerse en campo contrario. Sin balón, o peor aún, perdiéndolo constantemente, la estructura se rompe: el equipo sufre más transiciones, defiende más metros, retrocede antes y se aleja del área contraria.
La comparación con el resto de la categoría refuerza la idea: los equipos que tienen porcentajes altos de precisión suelen moverse en la parte alta; los que caen por debajo del 78–79% viven mucho más cerca del barro competitivo. Y el Cádiz CF lleva semanas instalado en esa segunda realidad.

El cuadro amarillo ha cedido terreno y ya es décimo tras la jornada, con la sensación de que los partidos no se le escapan por inferioridad futbolística, sino por un déficit técnico que impide imponerse en los tramos clave.
Ni en Córdoba, donde ganó con muy poco, ni ante el Racing, donde perdió jugando bien, se vio un equipo capaz de gobernar el ritmo. Y en esta liga, gobernar el ritmo es media supervivencia.
Toca buscar explicaciones en lo futbolístico antes de mirar a coincidencias extradeportivas. Aunque resulte curioso que el último triunfo en casa coincidiera con los días previos a que Nomadar anunciara su intención de salir a bolsa, la realidad está sobre el verde: el Cádiz no gana en el Nuevo Mirandilla desde el 12 de octubre.
Y eso, más allá de cualquier teoría, es un problema estrictamente futbolístico que el equipo debe corregir cuanto antes. Habrá que buscar explicaciones en el césped, donde de verdad se ganan y se pierden puntos. Porque si no, siempre aparecerán las coincidencias: el Cádiz era líder la misma semana que se anunció la salida a bolsa de Nomadar… y desde entonces no levanta cabeza. Casualidades del fútbol. O no.