El Cádiz CF prolonga su mala racha pese a mejorar su imagen y sus prestaciones
El Cádiz no sale del bache de resultados en el que lleva ya siete jornadas. Al menos, ante el Sevilla, su imagen ha sido mejor, pero de nuevo ha visto como le empataban un 2-0. Pese a todo, el resultado parece justo, ya que el Sevilla tuvo el balón y el dominio y el Cádiz las ocasiones.
El partido tuvo, pese al buen espectáculo futbolístico, otro protagonista. Lo del colegiado en el primer tiempo fue de lo que no se le puede permitir a un árbitro de la primera división española. Le perdonó la expulsión a Sergio Ramos en el minuto diez (si el toque a Roger no la merecía en el 2) y, ejemplo de valentía arbitral, luego no se atrevió a expulsar a Lucas Pires por un plantillazo en el añadido del primer tiempo.
Como ven, para los dos lados, muy malo. Como cuando tardó una enormidad en parar una acción en la que el sevillista Juanlu se había salido del campo al centrar y el lo volvió a jugar entrando para ello en el terreno de juego. Una monería todo.
Pero entre el perdón de expulsión a Ramos darle un cosqui a Roger en el minuto 2 y medio y el plantillazo de Pires se vio un partido bonito. Pese al equipo arbitral.
Los amarillos comenzaron esta vez metidos en el choque y controlaron las primeras acometidas visitantes. Además, el Cádiz se atrevía a presionar en la salida de balón sevillista. Y así llegaron los dos goles locales en este primer tiempo.
El emocionante primer tanto tras un robo que aprovechó Roger para habilitar a Chris Ramos, quien tras un gran control orientado aprobó su asignatura pendiente: la definición. El tanto, como no podía ser de otra forma, llevó la dedicatoria entre lágrimas a su abuelo, recientemente fallecido.
El segundo, provocado un mal pase de Ramos (si hubiera sido expulsado no habría llegado esta acción, cosas del fútbol) y el balón llegó a pies de Darwin Machís que marcó con la izquierda.
Ahí el Sevilla tiró de orgullo y el Cádiz dio un paso atrás de más, mitad por verlas venir un poco mitad por el empuje visitante.
Ocampos y Juanlu comenzaron a entrar más y más por la derecha. En la izquierda Lukebakio podía con Iza y Alejo, mientras Suso y Rakitic aparecían cada vez más cerca del área. Los amarillos achicaban balones, pero el gol del cuadro sevillano parecía que iba a caer de maduro. Primero Ramos lo logró en un córner, pero mientras se besaba el escudo en la celebración el colegiado lo anuló. Poco después, Ocampos giró el cuello maravillosamente para poner lejos del alcance de Ledesma un buen centro de Juanlu.
Ahí aparecieron los fantasmas del Metropilitano y ya parecía que la misión del Cádiz era aguantar el marcador para llegar en ventaja al descanso. Mientras, el Sevilla daba sensación de peligro una y otra vez. Pero los amarillos aguantaron la ventaja incluso con algún arrendamiento final.
El segundo acto comenzó por los mismo derroteros: El Sevilla con más balón y más presencia, el Cádiz aguantando, pero mejor plantado y el árbitro demostrando que no puede pitar en primera (tampoco sabe ni aplicar la ley de la ventaja, al menos para el teórico equipo inferior; ni cuándo ni por dónde permitir el reingreso de un jugador que ha sido atendido en la banda).
Los amarillos dispusieron de una doble ocasión magnífica tras una gran acción de Chris Ramos, pero primero Roger y luego el propio gaditano se toparon con sendas paradas de Nyland.
Poco después, cuando parecía que Diego Alonso le había hecho un favor al Cádiz retirando a Lukebakio que ya era menos, llegó el empate definitivo. Rakitic la enganchó en semifallo, pero consiguió que al menos el esférico fuera a puerta. La parábola que cogió el balón hizo inútil la estirada de Ledesma.
El Cádiz reaccionó bien y siguió compitiendo. Los dos equipos se acercaban al área rival con intención y efectivos. Los amarillos sobre todo por la izquierda, por donde generó una buena acción en la que a Chris Ramos se le fue un poco largo el control y se adelantó el meta sevillista.
Los compases finales fueron de incertidumbre en un partido abierto. El Cádiz, sin Fali y con dos centrales bajitos (y zurdos), veía como el Sevilla había acumulado a dos cabeceadores de la talla de En-Nesiry y Rafa Mir y a Jesús Navas para suministrarles balones.
Los amarillos se defendieron bien y trataron de estirarse. Pero el marcador no se movería de unas tablas que no daban por buenas ninguno de los dos antes de empezar, pero que parecen justas.
Ficha técnica:
Cadiz CF: Ledesma; Iza, Fali (Meré, minuto 46), Javi Hernández, Lucas Pires; Iván Alejo (Alex Fernández, minuto 81), Alcaraz, Koume (Escalante, minuto 74); Darwin Machís (Sobrino, minuto 46); Roger Martí (Sergi Guardiola, minuto 86) y Chris Ramos.
Sevilla FC: Nyland; Juanlu (Jesús Navas, minuto 73), Gudelj, Sergio Ramos, Acuña (Pedrosa, minuto 80); Soumaré, Rakitic, Suso (Oliver Torres, minuto 58); Ocampos, Lukebakio (En-Nesiry, minuto 58) y Mariano (Rafa Mir, minuto 80).
Goles:
1-0, minuto 8: Chris Ramos.
2-0, minuto 28: Darwin Machís.
2-1, minuto 37: Ocampos.
2-2, minuto 61: Rakitic.
Árbitro: Soto Grado (Riojano). Amonesta a los locales José Mari (en el banquillo), Iván Alejo, Fali, Koume, Lucas Pires y Sobrino y a los visitantes Sergio Ramos, Soumaré, Ocampos y Acuña.
Incidencias: Partido correspondiente a la decimoprimera jornada de La liga EA Sports disputado en el Estadio Nuevo Mirandilla.