El IES Manuel de Falla de Puerto Real se encierra en apoyo a Palestina y contra la ofensiva israelí
La acción se inició en torno a las 22:30 horas y se extendió hasta la mañana del jueves
La comunidad educativa del IES Manuel de Falla, en Puerto Real ha protagonizado entre la noche del miércoles y la madrugada del jueves un encierro en las instalaciones del centro para manifestar “su solidaridad con la población de Gaza y la causa palestina, y como rechazo rotundo al genocidio israelí”.
La acción se inició en torno a las 22:30 horas y se extendió hasta la mañana del jueves, cuando alumnado y profesorado se dirigieron hacia Cádiz a fin de poder sumarse a la manifestación convocada en el marco de la huelga estudiantil estatal.
Durante el encierro, se organizaron actividades orientadas y centradas en la Historia y la situación actual de Palestina. Participaron representantes de distintos sectores de la comunidad educativa, que invitaron a reflexionar y debatir a la par que también para elaborar pancartas y materiales que portarían más tarde en las calles.
La protesta se enmarca en las movilizaciones que el Sindicato de Estudiantes ha convocado en toda España a fin de poder visibilizar la situación en Gaza.
Una noche de protesta y aprendizaje en el IES Manuel de Falla de Puerto Real
La velada estuvo marcada por un fuerte componente reivindicativo ya que indican que los asistentes, la comunidad educativa siguió con “indignación y rabia” la noticia de la detención por parte de Israel de los tripulantes de la flotilla que trataba de llegar a Gaza con ayuda humanitaria.
Una de las participantes, Cristina Honorato, indicó que este episodio fue vivido como una muestra más de la violencia ejercida contra el pueblo palestino.
Antes de marchar hacia la capital gaditana, alumnado y profesorado hicieron una cacerolada frente al instituto, donde desde principios de septiembre ondea la bandera palestina como señal de compromiso con la causa. La acción despertó la atención de vecinos y transeúntes, que se quisieron sumar con aplausos al acto.
El centro educativo se constituyó en septiembre como parte de la denominada “marea palestina”, que se trata de una iniciativa que agrupa a colegios e institutos de todo el país en apoyo a Palestina.
Desde el inicio del curso se celebran los llamados “martes por Palestina”, que son actividades que incluyen charlas, proyecciones y talleres de sensibilización. Esta continuidad, explican desde el claustro, ha hecho que exista una implicación especial del alumnado con la causa.
“Desde el principio tuvimos claro que no queríamos ser cómplices de este genocidio”, dijo Honorato, recordando que la comunidad educativa no puede guardar silencio ante lo que consideran crímenes cometidos en Gaza.
El claustro del centro aprobó por unanimidad un comunicado en el que se denunciaba la destrucción de la infraestructura educativa en Palestina así como exigía medidas internacionales.
En ese escrito, el instituto hizo referencia a cifras devastadoras pues so más de 600 docentes asesinados, más de 160 escuelas bombardeadas, 90 centros educativos de la UNRWA destruidos y más de 18.000 estudiantes muertos en los ataques.
Al respecto de ello indican en el comunicado que “ha llegado el momento de que la sociedad tome medidas inmediatas, exija el cumplimiento del derecho internacional y se rompan las relaciones diplomáticas y comerciales con Israel”.
La iniciativa del IES Manuel de Falla se suma a un movimiento que es mucho más amplio en España, en el que distintos colectivos educativos, sindicales y sociales han mostrado su respaldo al pueblo palestino.
El paro convocado por el Sindicato de Estudiantes busca el poder visibilizar esa solidaridad, señalando a la juventud como protagonista de la denuncia.
Tras el encierro, alumnos y docentes del instituto marcharon hacia Cádiz para unirse a la manifestación que está prevista para las 12:00 horas. Se espera una amplia participación de estudiantes de la provincia de Cádiz, que han secundado el llamamiento a la huelga general contra la ofensiva israelí en Gaza.
El IES Manuel de Falla, con su acción de protesta, se ha convertido en una referencia del compromiso de parte de la comunidad educativa andaluza con la causa palestina. Un gesto que, según sus organizadores, trata de “remover conciencias” y recordar que la defensa de los derechos humanos debe ocupar también un espacio en las aulas.