La comuna hippie desalojada en Benaocaz se muda a Bolonia
Con la música a otra parte. La comuna hippie desalojada en la Sierra de Cádiz, concretamente en Benaocaz, se ha trasladado a Bolonia, en Tarifa. La Guardia Civil espera una orden de desalojo para poder expulsarlos de una finca privada.
Cabe recordar que el desalojo en Benaocaz, llevado a cabo también por la Guardia Civil, se saldó con dos personas detenidas por desobediencia grave y resistencia. Fueron desalojadas más de 150 personas que forman parte de la llamada Familia Arcoiris, una comuna hippie que, motivados por el ciclo lunar, se asentó ilegalmente el pasado mes de mayo en una finca privada dentro del Parque Natural de la Sierra de Grazalema, a unos tres kilómetros del municipio de Benaocaz.
El desalojo fue "muy fluido y pacífico" aunque también "largo y duro" para los agentes que participaron en él.
Durante el desalojo hubo quienes opusieron resistencia a la orden judicial, dos de ellos detenidos, pero no fue algo que los guardias civiles no pudieran controlar y es por eso que han mostrado su satisfacción por cómo se ha desarrollado el operativo.
Esta es la segunda vez en la historia que la Familia Arcoiris es desalojada, siendo la primera vez hace 40 años en Austria.
Efectivos de la Guardia Civil continuaron en la zona para controlar el perímetro y que no hubiera un nuevo intento de asentamiento, además de colaborar con el Parque Natural para retirar los últimos enseres que quedaban en el lugar donde estuvieron estas personas durante más de dos semanas.
El dispositivo, en el que participaron agentes de Seguridad Ciudadana, GRS, del equipo Pegaso con un dron y también del servicio Cinológico, entre otros, se puso en marcha debido a una orden dictada por el Juzgado de Instrucción de Ubrique con la que se aprobaba el desalojo de este asentamiento, que pretendía quedarse en la zona hasta que acabase el ciclo lunar este viernes 16 de junio.
Fue el pasado mes de mayo, coincidiendo con el inicio del ciclo lunar, cuando un centenar de personas acamparon de manera ilegal en la zona subida a Fardela, una finca privada en el término municipal de Benaocaz y enmarcado dentro del Parque Natural de la Sierra de Grazalema.
Una vez se supo de su establecimiento en esos terrenos, la Guardia Civil montó un dispositivo para evitar el acceso a la zona y que acudieran más personas para unirse a esta comuna. Como medida de persuasión, se interpusieron numerosas sanciones por hacer fogatas y acampar, y se fueron desmontando las estructuras que montaban para evitar que se sintieran "cómodos".
Durante estas semanas, integrantes de la comuna hippie y vecinos de Benaocaz convivieron de manera tranquila, aunque con la presencia constante de la Guardia Civil.
Ahora llegan a la costa, a Bolonia. El medio centenar de personas que se ha trasladado estos días ha llegado hasta un lugar privilegiado en pleno Parque Natural del Estrecho, una finca privada cuyo dueño ya ha interpuesto la correspondiente denuncia ante la Guardia Civil.