La Guardia Civil desmantela ocho 'CBD shops' en Cádiz por vender productos con marihuana y hachís
La documentación aportada por los responsables de los comercios no acreditaba el origen ni la trazabilidad de estos productos
La Guardia Civil de Cádiz ha dado un nuevo golpe al comercio ilegal de productos que derivan del cannabis tras una amplia operación que ha culminado con la inspección de ocho establecimientos conocidos como “CBD shops”.
Estos "CBD shops" están repartidos por las localidades de Conil, Chiclana, Barbate, Alcalá de los Gazules y Prado del Rey. Los agentes intervinieron más de 70 kilos de sustancias estupefacientes y productos alimenticios que han sido elaborados con derivados de la marihuana, valorados en más de 47.000 euros.
La actuación, desarrollada por la Unidad de Análisis e Investigación Fiscal y de Fronteras (UDAIFF), está enmarcada dentro de las operaciones contra el comercio ilegal de productos con THC, el componente psicoactivo del cannabis.
En su totalidad se han investigado a ocho personas como presuntos autores de un delito contra la salud pública.
Las inspecciones simultáneas se realizaron en ocho locales abiertos al público, en los que se vendían cogollos de marihuana, resina de hachís y productos alimenticios con componentes derivados de las sumidades floridas del cannabis.
Durante la intervención, los agentes decomisaron 16,2 kilos de cogollos, 2,6 kilos de resina y una amplia variedad de artículos —tales como aceites, dulces y vaporizadores— que contenían THC.
La documentación aportada por los responsables de los comercios no acreditaba el origen ni la trazabilidad de estos productos, incumpliendo los requisitos legales dispuestos de control sanitario y comercialización.
Según la Guardia Civil, todos los derivados de los cogollos de la marihuana están incluidos dentro de la lista I de la Convención Única de Naciones Unidas sobre Estupefacientes, independientemente de su concentración de THC, esto hace de ellos productos no autorizados para su venta al público.
La inspección más relevante tuvo lugar en Conil, donde los agentes descubrieron un almacén oculto empleado por una de las empresas inspeccionadas para distribuir estupefacientes tanto a nivel local como a otros puntos de España.
En el interior del local se hallaron 52,5 kilos de sustancias estupefacientes, que estaban preparados para su distribución a otros establecimientos y para la venta en línea.
Según fuentes de la investigación, esta empresa era una de las principales suministradoras de estos productos ilegales con THC en territorio nacional.
Con esta intervención, la Guardia Civil considera desmantelada una red de distribución que operaba en entornos como tiendas físicas como a través de canales digitales, utilizando la etiqueta “CBD” como pantalla a fin de ocultar el comercio de drogas.
Continuación de las operaciones “ICE SHOP” y “SUMIFLOR” en Cádiz
Esta operación es parte de la línea de actuaciones que la Guardia Civil viene desarrollando desde comienzos de año. En mayo, fue ejacutada la operación “ICE SHOP”, en la que fueron detenidas cinco personas por la venta de productos con cannabis.
En marzo, la operación “SUMIFLOR” permitió clausurar diferentes puntos de venta en la capital gaditana dedicados al mismo ilícito.
Las investigaciones han revelado que el fenómeno de las CBD shops ha crecido de forma importante en la provincia de Cádiz en los últimos años, aprovechando el vacío legal existente en torno al uso del cannabidiol.
El cannabidiol es compuesto no psicoactivo del cannabis aunque muchos de estos establecimientos han comercializado productos con niveles de THC superiores a los permitidos, y se incurría en delitos contra la salud pública.
Tras el cierre de los establecimientos, todas las sustancias intervenidas, junto con los distintos productos alimenticios y vaporizadores incautados, han sido remitidos a la Delegación Provincial de Sanidad Exterior de Cádiz para su profundo análisis y evaluación.
Las diligencias continúan abiertas, mientras las autoridades sanitarias y judiciales determinan el destino final de estos productos decomisados.
La Guardia Civil ha indicado que continuará realizando inspecciones periódicas en la provincia para controlar la venta ilegal de estos derivados del cannabis, reforzando la vigilancia sobre este tipo de establecimientos que operan bajo la denominación “CBD shop” pero que, en muchos casos, sirven como tapadera para la distribución de marihuana y hachís.