Las familias de Javier de Burgos 19 exigen una solución sin tener que abandonar Cádiz
Las familias rechazan el realojo fuera de Cádiz y exigen una solución que no implique abandonar su ciudad, su barrio ni su vida
Este miércoles 25 de junio por la tarde, las familias residentes en la finca de la calle Javier de Burgos, 19, en pleno centro histórico de Cádiz, protagonizaron una acción de protesta para denunciar su situación habitacional y rechazar la propuesta de realojo ofrecida por la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb), entidad pública conocida como el banco malo.
Convocada por el Sindicato de Inquilinas de Cádiz, la movilización reunió a residentes del edificio, activistas vecinales y representantes de distintos colectivos sociales y políticos. En la puerta de la finca colgaron pancartas, carteles y leyeron manifiestos para visibilizar una realidad que consideran insostenible. Las familias denunciaron que, tras años de abandono institucional, ahora se les pretende expulsar de su ciudad bajo el pretexto de un realojo temporal.
“Queremos que esta solución sea en Cádiz, porque nosotros somos de Cádiz, nuestros niños tienen colegio en Cádiz, nosotros tenemos trabajo en Cádiz, nuestra vida es Cádiz”, expresó Khaoula Ben Kassem, una de las inquilinas. “Queremos que la solución salga de Cádiz, del Sareb y del Ayuntamiento también, porque nosotros pertenecemos a Cádiz y al Ayuntamiento de Cádiz, no a San Fernando”, añadió, visiblemente emocionada. La vecina subrayó que incluso los compañeros de clase de sus hijos se habían acercado a apoyarles: “Hoy han venido niños del colegio para que no se vayan sus amigos a otra parte”.
Jesús Manuel Prieto Olvera, otro de los afectados, fue contundente: “Veo que el Ayuntamiento aquí no hace nada, tanto como dice la prensa. Me estoy dando cuenta de que aquí el Ayuntamiento no hace nada, ni el Ayuntamiento ni la Sareb. Nadie nos da una solución. Estamos ya aburridos, no sabemos qué hacer ni dónde ir a reclamar ayuda. Nos echan tierra encima y no sabemos por dónde salir. Esto es insostenible”.
La comunidad vecinal rechaza de forma unánime la propuesta de Sareb de realojo en una finca situada en la localidad vecina de San Fernando, a 12 kilómetros de la capital gaditana. Según explicaron durante la protesta, Sareb ha ofrecido esta como “única alternativa”, al no disponer actualmente de viviendas habitables en la ciudad. Las familias temen perder sus redes de apoyo, empleo, acceso a servicios médicos y la continuidad escolar de sus hijos.
“Nos están obligando a irnos a un pueblo que no es nuestro. Nuestros hijos han nacido en Cádiz, han vivido el agua de Cádiz y quieren estar con sus amigos en Cádiz”, insistió Khaoula. “Y estamos viendo que nos están ofreciendo una salida que es un desarraigo completo”.
Además, durante la concentración se denunciaron las condiciones estructurales del edificio. Las familias aseguraron que los técnicos que han visitado el inmueble en las últimas semanas, supuestamente enviados por Sareb, “han confirmado que la finca no cuenta ni con planos ni con una Inspección Técnica de Edificios (ITE) registrada en Urbanismo”.
“De momento, lo único que ha hecho Sareb es poner puertas antiokupas en las viviendas vacías, lo que agrava todavía más el peligro, porque si pasa algo dentro nadie puede ayudarnos”, lamentaron los residentes. “Estamos esperando que salga el informe de los técnicos para saber cuánto tiempo va a durar la rehabilitación. Pero mientras tanto, vivimos entre ratas, goteras y techos que se pueden caer”.
Los vecinos también criticaron la falta de coordinación institucional. “Aquí se pisan unos a otros. Vinieron obreros cuando aún estaban puestas las trampas de sanidad por las ratas. No se respeta ningún protocolo. Es un desastre total”, aseguró Jesús Manuel.
Durante la protesta, se recordó que las familias afectadas han reiterado a Sareb que no aceptarán un realojo fuera de Cádiz. “Claro que se lo hemos dicho. Esta es la única oferta que tienen, pero para nosotros no es viable. Estamos aquí en Cádiz, y si somos de Cádiz, tienen que buscar la solución aquí”, afirmaron. Aunque Sareb ha abierto la puerta a buscar otras soluciones, como el alquiler de viviendas ajenas o plazas en hostales, las familias desconfían: “¿Dónde vamos a encontrar alquiler en Cádiz? Con tanto piso turístico, eso es imposible”, concluyeron.
La movilización finalizó con una llamada a continuar la lucha. “La finca no está sola. Porque quien habita, resiste. Porque Cádiz no se rinde”, corearon al unísono quienes participaron en una jornada que unió dignidad, protesta y comunidad frente a lo que consideran una expulsión encubierta de su ciudad.