Grupo de manifestantes camina en la huelga del metal de Cádiz.
Manifestantes de la Huelga del metal en Cádiz. (Fotografía Eulogio García).

UGT abre la puerta a renegociar el preacuerdo del metal tras el rechazo de las plantillas

Montoro admite que el documento “no se ha entendido bien” y que está dispuesto a revisar aspectos del pacto alcanzado el domingo con la patronal, mientras la huelga sigue activa

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El sindicato UGT da un giro este martes 25 de junio en la postura existente del preacuerdo alcanzado con la patronal del metal en Cádiz (FEMCA) después de constatar el gran rechazo surgida entre las plantillas de la industria auxiliar.

Antonio Montoro, secretario de la federación del Metal en UGT, ha expresado públicamente que “todo es reconducible y renegociable”, y que el texto rubricado en el Sercla tiene que comprenderse como “una base para seguir negociando” y no como un documento que está cerrado.

Las declaraciones llegan después de 30 horas tras la firma del preacuerdo, aún no ha sido ratificado oficialmente por UGT en su asamblea de delegados. Mientras tanto, la huelga indefinida prosigue en toda la provincia y los trabajadores siguen movilizados, sobre todo en Cádiz capital y en los centros de Navantia.

Montoro indicó que “hoy dedicaré el día a intentar reconducir la situación y hacer gestiones a todos los niveles, incluso dentro de mi propio sindicato” en su mensaje destinado a las plantillas, en la que también ha reconocido que el contenido del preacuerdo “no se ha entendido bien”, insistiendo en que el objetivo era “sentar las bases” de una negociación mucho más extendida sobre el convenio colectivo.

UGT ha defendido hasta ahora el preacuerdo como un “convenio de futuro”, queriendo destacar avances como la garantía del IPC, los atrasos ya pactados, la recuperación del plus tóxico, penoso y peligroso, así como una nueva regulación del contrato fijo discontinuo. Pero el rechazo generalizado entre las asambleas de trabajadores ha dado lugar a una situación de bloqueo que obliga al sindicato a revisar la hoja de ruta mantenida al respecto.

Discrepancias con el preacuerdo del metal

En paralelo a todo ello tanto Comisiones Obreras (CCOO), CGT y la Coordinadora de Trabajadores del Metal (CTM) sostienen su postura crítica. CCOO sigue reiterando que el convenio “hipoteca a toda una generación” a la par que denuncia elementos que considera regresivos, como la duración hasta 2032, la introducción de contrataciones al 75% del salario para menores de 25 años sin experiencia así como la falta de garantías para la industria auxiliar.

Pulsando el ambiente en la calle ha un claro descontento. Este lunes, pese al anuncio del preacuerdo, se realizaron cortes de tráfico, sentadas, cargas policiales y se produjeron varios detenidos en Cádiz capital, todo ello pone en evidencia que las bases no se sienten representadas en el texto que se ha pactado entre la patronal y UGT.

Montoro reconoció que los trabajadores “siguen de huelga” y que no se puede permitir que  la situación “se enquiste”, por lo que su prioridad se encuentra, en este momento, en buscar soluciones.

Al respecto de todo ello dijo que “está muy bien criticar el acuerdo, pero también hay que aportar”. La dirección de UGT ha indicado que trabajará para aclarar puntos polémicos del texto y no descarta que se puedan introducir modificaciones si así lo exige la base trabajadora.

La huelga sigue adelante y las plantillas piden un convenio más justo, que tenga garantías para el empleo estable y sin recortes en derechos históricos ya alcanzados.