Vizcaíno fija el objetivo de la campaña del Cádiz CF
El Cádiz CF ha presentado la campaña de abonos para la próxima temporada 2025-2026. Antes de convocar la rueda de prensa, la confirmación el viernes del fichaje de Suso hacia que estuviera cantado que se iba a celebrar hoy.
En esta rueda de prensa de presentación, el presidente del club cadista, Manuel Vizcaíno, ha hablado del objetivo que se marca la entidad para esta campaña de abonos después de la decepcionante temporada 2024-2025 que ha completa el equipo cadista. Y parece un objetivo ambicioso.
Para el Cádiz, la meta en este proceso de renovación de abonos y de nuevas altas es clara: mantener la masa social a pesar del desánimo que ha dejado la penosa última campaña en Segunda División. Una campaña en la que, lejos de optar al ascenso como podái pensarse de un reci9én descendido de primera como era el Cádiz, el equipo no ha llegado ni a ilusionar durante la competición. El Almería esta jugando esa fase de ascenso y el Granada tuvo opciones de entrar en ella hasta el minuto 97 del último partido, por citar a los otros dos descendidos el pasado verano.
Pese a la decepción, el Cádiz aspira a mantener su masa social. Así lo ha señalado Manuel Vizcaíno, durante la presentación oficial: “Aumentar no se puede, por la capacidad del estadio. El objetivo es mantener la cifra del año pasado”. Actualmente, el Cádiz ronda los 20.000 abonados, una cifra que se antoja difícil de alcanzar tras una temporada tan mala en lo deportivo y en lo institucional.
Y es que el curso 2024/2025 ha sido especialmente duro para la afición. Tras descender el año anterior, la grada esperaba al menos una plantilla competitiva. Pero el Cádiz no se ha presentado a la pelea por el ascenso. El dato es elocuente: solo ha estado dos jornadas en la primera mitad de la tabla. El resto del campeonato ha sido una travesía por el fondo de la clasificación, con un equipo solo encontró su nivel competitivo en los diez partidos sin perder que estuvo desde la llegada de Garitano al banquillo.
Consciente de ese desgaste, Vizcaíno quiso lanzar un mensaje de renovación anímica. “Ha sido una temporada triste, y hay gente que puede tener dudas. Pero vamos a intentar ilusionar a la gente, no solo porque muchos pagarán menos que el año pasado, sino porque queremos hacer un proyecto que esté a la altura de lo que esperan de nosotros”, señaló.
El presidente pidió mirar más allá del desencanto. Vizcaíno cree que el cadismo, todo él, tiene que olvidarse “un poco de las dos últimas temporadas. Este club ha tenido una trayectoria buena en los últimos años, y ahora vamos a conformar una plantilla competitiva, con gente con hambre, con ganas, con compromiso… con lo que la grada quiere”.
También apeló al corazón del cadismo al señala que “el abonado del Cádiz ha estado con el equipo hasta en Segunda B, de forma enfermiza. Ahora es momento de mirar la parte positiva y conseguir que el estadio vuelva a ser la caldera que siempre fue”.
Con precios congelados, descuentos por antigüedad y una campaña centrada en el orgullo de pertenencia, el club se juega ahora algo más que los ingresos por abonos: se juega su reconexión emocional con la grada.