Fernando Vivas: "No es la primera vez que me recrimina que cobre una invalidez por el cáncer"

Fernando Vivas no quiere personalizar lo ocurrido ayer en el Pleno. Entre otras cosas, porque el teniente de alcaldesa, José Blas Fernández, "ya me había recriminado en otras ocasiones que cobrara una invalidez por padecer cáncer de colón. Al menos, una o dos veces más". La única diferencia entre el incidente de ayer y los ocurridos anteriormente, es "que se encontraba la cámara de CádizDirecto".
"Me tocó a mí, pero porque no se lo puede decir a otro". Denuncia, también, la actitud de Ignacio Romaní, pues demuestran, en definitiva, que "tras los recortes de los populares no se encuentran factores económicos, sino ideológicos". Vivas apenas ha dormido esta noche, despierto ha reflexionado sobre los enfermos de hepatitis C y tantos ciudadanos que dependen de la Sanidad Pública. "Esa casta política del PP mantiene sus privilegios a costa de la clase trabajadora".
El concejal aclara que su pensión es compatible con el cargo que ocupa, pues "tengo un cargo de representación en el Ayuntamiento, no un trabajo". E intuye que esa animadversión de Blas Fernández proviene de una denuncia que realizó hacer unos años a las pensiones vitalicias de algunos sectores políticos. Vivas concluye que "yo ni quería ni busqué padecer un cáncer, por eso no entiendo que me lo echen en cara estos privilegiados del régimen".
Martín Vila, portavoz de la formación, ha exigido al edil popular que "dimita o que rectifique públicamente. Ha demostrado su verdadero talante". "Una cosa es que no nos den la información que solicitamos, que nos llame comunista, y otra es el insulto". Martín considera que, en el fondo de la cuestión, se encuentra un ataque a la clase trabajadora. "Ayer, demostraron el miedo que sienten, pues este año se acaba el chiringuito que tienen en la ciudad",
Piden, desde Izquierda Unida, que en vez de descalificar, Blas Fernández debería "responder sobre las cuestiones de EMASA". Por último, se pregunta si trata "igual" a quien acude a su despacho (el edil es graduado social) para intentar obtener una pensión vitalicia.