La rotura de fibras de Óscar Rubio crea un problema en el lateral derecho
- El Cádiz CF ya cuenta con el primer problema serio para el play off de ascenso, justo en la demarcación en la que sólo cuenta con un jugador específico. Óscar Rubio sufre una rotura de fibras, una lesión cuyo tiempo de recuperación suele oscilar entre las tres y las cinco semanas, cuando sólo queda un mes para comenzar la eliminatoria decisiva por dar el salto a Segunda A.
De esta forma el equipo amarillo se queda cojo en el lateral derecho para los próximos partidos y Claudio Barragán se verá obligado a utilizar la opción de emergencia de colocar a Mantecón en dicha demarcación, como ocurrió en Lucena después de que el ilerdense se lesionara durante el calentamiento.
Los fisioteraupeutas intentarán reducir al máximo el tiempo de recuperación para que pueda disputar, al menos, el último partido de Liga en Arroyo y llegue con algo de rodaje al play off de ascenso.
Es la segunda lesión que sufre Óscar Rubio en la presente temporada, anteriormente estuvo tres meses de baja por un desgarro en el abductor. Durante ese periodo de tiempo el técnico de decantó siempre por Mantecón en el lateral derecho, aunque no se descarta que en estos partidos que restan, con el liderato prácticamente amarrado, pruebe con otros futbolistas en esa demarcación para comprobar cómo se desenvuelven y poder decidirse por la mejor opción para el play off en el supuesto de que Óscar Rubio no llegara en las mejores condiciones.
La plantilla del Cádiz no cuenta con un sustituto específico en el lateral derecho. La dirección deportiva confió en el africano George para asumir ese rol, pero no convenció a Antonio Calderón durante la pretemporada y fue relegado al Cádiz B. El jugador no asumió bien esa decisión y se marchó al filial del Zaragoza.
Meses después se contrató a Juanan, con amplia experiencia en Segunda B con el Sevilla Atlético, con la promesa de que jugaría en Tercera con el filial cadista y que en el mercado invernal pasaría a tener ficha con el primer equipo. Sin embargo, al ser mayor de 23 años había que dar una baja a otro integrante del plantel, por lo que tanto Barragán como la dirección deportiva decidieron no tramitar su licencia con los mayores, por lo que el futbolista también siguió el camino de George y se marchó del club.
Jorge Cordero sondeó el mercado para intentar firmar un lateral derecho sub'23, pero acabó el plazo sin éxito en su búsqueda, llegando a la fase decisiva del campeonato con Óscar Rubio lesionado.