Un domingo de ruina para la cantera del Cádiz CF 'corona' la gestión de Rafael Contreras en el club
Hecatombe de descensos en las categorías inferiores cadistas, bajo la responsabilidad directa del vicepresidente de la entidad
Parecía difícil que se pudiera superar a sí mismo, pero todo lo que toca el vicepresidente del Cádiz CF, Rafael Contreras, acaba convirtiéndose en un fiasco o un fracaso, cuando no abandona el barco antes de lo esperado.
Este domingo 4 de mayo quedará marcado en la historia del Cádiz CF como uno de sus días más aciagos: hasta cuatro de sus equipos de la cantera cadista han descendido. Probablemente los cuatro principales en la categoría masculina, por el escalafón de edad en el que se encuentran sus futbolistas. Y, ¿quién es el responsable de la cantera cadista? Correcto
Así que Rafael Contreras suma un nuevo hito en su trayectoria y en su etapa dentro del Cádiz CF. El impulsor y casi inventor (por no decir prestidigitador) de proyectos como Sportech o Nomadar —más conocidos por sus promesas que por sus resultados a fecha de hoy— puede presumir ahora de otro logro: el hundimiento del fútbol base del club.
El filial (Mirandilla), el Balón de Cádiz, el Juvenil B y el Juvenil C han descendido. Cuatro descensos en una misma campaña. En un mismo día. Una catástrofe deportiva que no admite matices ni justificaciones.
Lo relevante no es solo el dato, sino el contexto. Desde su llegada al club en marzo de 2021, Contreras ha ido acumulando poder y competencias. Entre ellas, la gestión de la cantera. Así lo ha afirmado el propio club en múltiples ocasiones, y así lo dejó claro el presidente Manuel Vizcaíno durante la comida navideña del club: "Vamos a seguir apostando por la cantera del club, y quiero felicitar al vicepresidente por lo que se está invirtiendo en ella". No fue un desliz. En entrevistas, como la concedida en Radio Marca —con quien firma estas líneas presente— Vizcaíno repitió que el proyecto de cantera es responsabilidad directa de Contreras.
Aquellas declaraciones del almuerzo de navidad ya se leían como un mensaje en clave interna, pero ahora parece que llevan implícitas un “te espero en pares”, como dicen los jugadores de mus. El control de la cantera es de Contreras. Y también tiene que serlo el desenlace. Peajes que ha pagado el presidente del club, Manuel Vizcaíno, que al fin y al cabo es el máximo responsable de la entidad.
Y ya en Navidad la temporada apuntaba mal. El Mirandilla naufragaba, sin identidad ni respuestas, y se optó por destituir a Juanma Cruz. En su lugar llegó un técnico de la confianza del nuevo hombre fuerte del Cádiz, Juan Cala. Un entrenador de su total confianza y de la localidad del ex futbolista ahora en la Secretaría Técnica cadista.
El Cádiz CF riza el rizo
Lo más grotesco de este final de temporada ha sido la falta de cálculo. En la jornada decisiva de hoy, el Mirandilla necesitaba derrotar al San Fernando y que la Balona (también descendida) y el Villanovense perdieran para jugar promoción de permanencia. El filial cadista vencía al San Fernando mientras el Villanovense ya ganaba 3-0 en el minuto 10, lo que hacía imposible cualquier salvación.
La victoria no solo fue inútil: hundió al San Fernando y de paso arrastró al Balón de Cádiz a Primera Andaluza. Resulta curioso que nadie en el club fuera capaz de ver venir esta situación como iba la mañana. Ni con Inteligencia Artifical aplicada al fútbol en la que se doctoró Rafael Contreras. O no ha sido tan inteligente, ni tan aplicada al fútbol o es que estaba aún bajo los efectos del reseteo tras el apagón del lunes. Quizá ese máster en IA sirva más para las ruedas de prensa y los currículums que para leer una clasificación.
Y mientras los equipos del fútbol base caen uno tras otro, la narrativa pública de Contreras seguía intacta: visión, futuro, transformación. Primero fue Sportech, aquella ciudad tecnológica del deporte que nunca ha pasado aún del PowerPoint (de una gran factura técnica y mediática, como los vídeos) un año y medio después. Luego Nomadar, supuesta empresa tech que prometía inteligencia artificial y cotización en Nasdaq y que, en la práctica, organiza campus de fútbol y comercializa la leyenda de Mágico González. En medio, los ecos de Humanox y sus espinilleras que se activan con un golpe, el tren bala y otras ideas que se anunciaron con focos pero que poco más se ha visto.
El Efecto Contreras del que hablamos en este medio en diciembre sigue ganando empaque en este Cádiz CF. No es una etiqueta gratuita: es la consecuencia visible y sostenida de una forma de gestionar. Todo lo que toca parece rodearse de ruido, marketing y promesas, pero con pocos resultados tangibles. Deportivos, institucionales o de credibilidad nada positivos, desde luego. A todo esto se suma un Cádiz CF con una penosa temporada en Segunda tras su descenso y ahora, como guinda, una cantera en ruinas.
Y si alguien duda de que el destino tiene humor negro, basta con repasar el catálogo de Netflix. Entre las películas más vistas a nivel mundial aparece Pánico en el tren bala. Un título que parece escrito a medida para describir la sensación generalizada que está dejando Rafael Contreras en el cadismo. Es el Rey Midas al revés: lo que toca, no lo convierte en oro, lo convierte en cenizas. Ojalá no lo logre con el Cádiz CF.