
Denuncian al Ayuntamiento de Cádiz por el abandono del centro Fermín Salvochea para personas sin hogar
La Asociación Despertares critica que el recurso cuesta 70.000 euros al mes

La Asociación Despertares, presidida por Carlos Grimaldi, ha vuelto a denunciar públicamente el estado del Centro de Alta Tolerancia Fermín Salvochea en Cádiz. Según la entidad, este recurso municipal supone un coste de más de 70.000 euros al mes, pero “no recibe el mantenimiento ni el cuidado que debería por parte de la empresa que lo gestiona”.
Grimaldi asegura que, pese a esa inversión, el centro no responde a las necesidades reales de las personas sin hogar y que su situación refleja “un abandono institucional que se repite año tras año”.
Desde Despertares subrayan que los problemas no derivan de falta de presupuesto, sino de la ausencia de control y exigencia a la empresa adjudicataria. “Hay dinero, pero no hay compromiso. Se paga cada mes y, sin embargo, el centro sigue deteriorado. No se mantiene como debería, y eso repercute directamente en las personas que más lo necesitan”, denunció Grimaldi.
El presidente de la asociación alerta de que cada invierno la situación se agrava y que el deterioro del Fermín Salvochea deja a decenas de personas sin la atención adecuada. “Con lo que cuesta, nadie debería dormir en un banco. Y sin embargo la realidad es esa”, añadió.
La enfermería de Salvochea, otra oportunidad perdida
La denuncia de Despertares incluye también el abandono de la enfermería del propio Fermín Salvochea, que consideran un espacio clave para atender a personas sin hogar con problemas de salud o adicciones, pero que, según la entidad, se encuentra “en estado deplorable, con un olor insoportable y sin uso real”.
“Ese espacio podría funcionar muy bien, pero está completamente abandonado. Es una pena porque podría salvar vidas y ahora mismo es otro ejemplo de dinero malgastado”, subrayó Grimaldi.
El veto a la asociación
Además del mal estado de los recursos, Grimaldi denunció que la asociación ha sido vetada por el Ayuntamiento de Cádiz. “Nos han cerrado las puertas por decir la verdad. Prefieren que callemos, pero nosotros no vamos a dejar de denunciar lo que ocurre”, aseguró.
El presidente de Despertares explicó que incluso muchas personas sin hogar se ven obligadas a callar por miedo a perder acceso a los recursos. “Si hablas, te arriesgas a quedarte fuera. Y entonces, ¿qué les queda? Nada. Ese silencio impuesto es otra forma de maltrato”, añadió.
Una semana de denuncias
Esta intervención llega pocos días después de otra denuncia de la misma entidad, que subrayó la paradoja entre una ciudad volcada en el Cádiz Romano y la falta de atención a las personas sin hogar.
“Primero hablamos de los comedores sociales cerrados en festivos y fines de semana; ahora señalamos que el Centro de Alta Tolerancia cuesta 70.000 euros y no se mantiene. Son dos caras del mismo abandono”, concluyó Grimaldi.