
Ecologistas y jóvenes scouts unen fuerzas en la playa de Camposoto para cuidar el litoral
Agaden Ecologistas en Acción y el Grupo Scout Eryteeia organizaron una jornada de actividades participativas centradas en la protección de los ecosistemas costeros

La playa de Camposoto fue el escenario este pasado domingo de una jornada de concienciación medioambiental organizada de manera conjunta por Agaden Ecologistas en Acción y el Grupo Scout Eryteeia de San Fernando.
La actividad reunió a familias, jóvenes y voluntarios a fin de poder participar en talleres prácticos con un doble objetivo como es sensibilizar sobre la importancia de proteger la biodiversidad del litoral y fomentar hábitos responsables en el uso de los recursos naturales.
El primero de los talleres estuvo dedicado al chorlitejo patinegro, que se trata de un pequeño ave limícola que habita en las playas gaditanas y cuya supervivencia se encuentra en seria amenaza por la presión humana y la pérdida de hábitat.
La actividad, dirigida por integrantes de Ecologistas en Acción, permitió a los asistentes conocer un poco mejor esta especie mediante explicaciones didácticas y la elaboración de dibujos.
Durante la sesión, se puso de relieve la fragilidad de este ave, que suele tener como sitio de anidamiento la arena durante los meses de primavera y verano, coincidiendo con la temporada turística.
Según los organizadores, la conservación del chorlitejo patinegro requiere medidas sencillas tales como, por ejemplo, respetar los espacios de nidificación, evitar el tránsito de vehículos en las zonas dunares y mantener las playas limpias de residuos.
Participación activa en Camposoto por la ecología
Los participantes, en su mayoría familias con niños, destacaron la utilidad del taller a fin de poder comprender que gestos cotidianos como recoger la basura o no molestar a la fauna local pueden marcar la diferencia en una tarea tan importante como la preservación del ecosistema.
De forma paralela, el Grupo Scout Eryteeia preparó un taller de reciclaje de maderas en el que los asistentes pudieron aprender a dar una segunda vida a restos y desechos. Con creatividad y destreza, los participantes convirtieron piezas en objetos ornamentales como llaveros y pequeñas figuras decorativas.
El objetivo de la propuesta fue mostrar de manera práctica cómo la reutilización de materiales que puede llegar a ser una buena herramienta para reducir el consumo de recursos y disminuir la generación de residuos.
Igualmente la actividad se presentó como un espacio lúdico y participativo que fomentó la cooperación y la conciencia ambiental desde las edades más tempranas.
La jornada del domingo se enmarca en una colaboración que Agaden Ecologistas en Acción y el Grupo Scout Eryteeia tienen desde hace varios años. Ambas entidades han desarrollado diversas iniciativas unidos, sobre todo en San Fernando y su entorno, siempre con el propósito de difundir valores de respeto hacia la naturaleza y de protección de los ecosistemas locales.
Los representantes de los colectivos coincidieron en señalar la importancia de dar continuidad a todas estas acciones, ya que permiten acercar a la ciudadanía a realidades medioambientales que, en ocasiones, pueden pasar desapercibidas. Además, subrayaron que este tipo de experiencias favorecen un aprendizaje entre diferentes generaciones en el que pequeños y adultos pueden compartir conocimientos y actitudes responsables.
Más allá de la jornada en Camposoto, el Grupo Scout Eryteeia sigue desarrollando sus actividades educativas a lo largo del año. Una de sus citas más destacadas se trata del tradicional campamento de verano en Jimena de la Frontera, en el que los jóvenes scouts tienen la oportunidad de convivir con el entorno natural y poner en práctica los valores de respeto, cooperación y sostenibilidad.
El movimiento scout potencia su vínculo con la defensa del medio ambiente, sumando esfuerzos con asociaciones como Agaden Ecologistas en Acción, que por su trayectoria se ha afianzado como una de las organizaciones más activas en la protección del patrimonio natural gaditano.
El éxito de la jornada en Camposoto viene a demostrar que la educación ambiental puede ser una herramienta eficaz para transformar hábitos y reforzar la responsabilidad ciudadana frente a los problemas climáticos y ecológicos del presente.
Las entidades participantes recordaron que el cuidado de playas, humedales y espacios naturales no depende solo de las administraciones públicas, sino que requiere la implicación de todos los ciudadanos y ciudadanas.
“Pequeñas acciones, como reducir el uso de plásticos de un solo uso o respetar las zonas de anidación de aves, tienen un gran impacto cuando se realizan de manera colectiva”, indicaron desde la organización.
La cita concluyó con un mensaje claro como es la defensa de la biodiversidad y de los ecosistemas costeros es una tarea compartida, en la que la educación, la creatividad y la participación de la sociedad son herramientas esenciales para construir un futuro más sostenible.