Un autobús urbano de Cádiz entra en una parada del Campo del Sur repleta de personas
Un autobús urbano de Cádiz entra en una parada del Campo del Sur repleta de personas. Foto: José Luis Porquicho Prada.

El alcalde de Cádiz reconoce los problemas con los autobuses y la limpieza en la ciudad

En una entrevista, Bruno García admite que el transporte urbano “está en precario” y que la limpieza es “insuficiente”

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El alcalde de Cádiz, Bruno García, ha admitido en una entrevista publicada este martes que el transporte urbano “está en precario” y que el servicio de limpieza es “insuficiente”, dos de los ámbitos más cuestionados en la ciudad durante los últimos meses.

Pese a que estando en la oposición, el PP apuntaba soluciones a ambas problemáticas, ahora el regidor responsabiliza de esta situación a los contratos heredados del anterior gobierno, pero asegura que desde el Ayuntamiento se van a reforzar los mecanismos de control y la exigencia a las empresas concesionarias.

Sobre los autobuses urbanos, García reconoce en esta entrevista publicada en Diario de Cádiz que el verano ha estado marcado por las averías y que el pliego del nuevo contrato aún no se ha podido sacar. “No quiero que sea una excusa, pero es evidente que arrastramos un problema del gobierno anterior, que tuvo ocho años para hacer el pliego y no lo hicieron”, afirma.

Según explica, el equipo de gobierno actual está finalizando los cuatro documentos necesarios para lanzar la licitación, que contempla la incorporación progresiva de 60 autobuses nuevos.

El alcalde admite que esa renovación será una solución a largo plazo y que, mientras tanto, “hay que seguir exigiéndole a la empresa que cuide, que mejore las herramientas que tiene para dar el servicio, que está en precario”. En este sentido, promete ser “muy insistente” con la concesionaria para que el servicio mejore mientras se completa la tramitación.

En cuanto a la limpieza, García asegura que el problema se encuentra en un contrato “a menos”, con frecuencias que “no eran las adecuadas”. “Es el que tenemos, y sobre eso tenemos que insistir mucho en la empresa para que cumpla lo mejor posible”, señala.

Para reforzar ese control, el Ayuntamiento ha incorporado más inspectores y ha puesto en marcha planes extraordinarios, como el que se desarrolla este mes de septiembre por las tardes en distintos puntos de la ciudad. “Creo que ya empieza a notarse”, apunta.

Estas declaraciones llegan después de un verano marcado por las quejas ciudadanas y las denuncias de la oposición sobre la situación de los autobuses urbanos. En agosto se registraron hasta seis vehículos averiados en apenas cinco días, incidencias relacionadas con el aire acondicionado durante la ola de calor e incluso episodios de desmayos y mareos en el interior de los vehículos.

Problemas que han continuado a comienzos de este mes de septiembre. También desde el comité de empresa se expresó malestar por las condiciones de los trabajadores y el deterioro de la flota.

En el caso de la limpieza, colectivos vecinales y partidos de la oposición habían advertido de la falta de medios en barrios y zonas muy transitadas. El alcalde sostiene que los planes extraordinarios puestos en marcha este mes son una respuesta a esas críticas y que el control sobre la concesionaria se ha reforzado.