
La tibieza de Agamama con la Junta de Andalucía en su manifiesto por el Día Internacional del Cáncer de Mama
La asociación gaditana leyó este jueves su manifiesto ante representantes del SAS, la Junta y el PP sin aludir directamente al escándalo de los cribados

En plena crisis sanitaria por el escándalo de los fallos del programa de cribado de cáncer de mama en Andalucía, la Asociación Gaditana de Mujeres con Cáncer de Mama (Agamama) ha optado por un tono sorprendentemente comedido.
Durante la lectura de su manifiesto con motivo del Día Internacional del Cáncer de Mama, la entidad evitó cualquier reproche al Servicio Andaluz de Salud (SAS) pese a la presencia de representantes del propio organismo, de la Junta de Andalucía y del Partido Popular municipal.
Esta lectura llega apenas dos días después de la protesta celebrada ante la sede provincial del SAS en Cádiz, donde afectadas y colectivos feministas lamentaron la ausencia de Agamama y su silencio ante un escándalo que ha retrasado durante años diagnósticos de cáncer en mujeres andaluzas.
Aquella manifestación, organizada por Mujeres Feministas en Defensa de la Sanidad Pública y la Marea Blanca gaditana, reunió a decenas de participantes que reclamaron responsabilidades y denunciaron la gestión sanitaria. En el acto, una afectada llegó a preguntar en voz alta: “¿Dónde está Agamama?”.
Tras aquellas críticas, la asociación respondió un día después con un comunicado en el que defendía su trayectoria y su carácter apolítico, reivindicando su labor de acompañamiento a mujeres con cáncer de mama. Sin embargo, la lectura del manifiesto este miércoles ha reforzado entre parte de las afectadas la sensación de distanciamiento entre la entidad y el malestar social generado por los errores del SAS.
Un tono institucional en un momento de crisis
El texto leído por la entidad, de unos ocho minutos, se centró en los avances médicos, la atención integral y la necesidad de mejorar la investigación y la reincorporación laboral de las pacientes, pero solo incluyó una referencia genérica al “problema de los cribados”. Ninguna mención explícita a los retrasos, a la dimisión de la consejera de Salud ni a las revisiones de casos que mantiene abiertas el SAS.
Para varias de las afectadas presentes en los actos, la ausencia de reproches resultó desconcertante. “Con la que está cayendo, parecía el momento de pedir explicaciones, no de pasar página”, comentó una de ellas tras la lectura del manifiesto. El contraste con el tono combativo de la manifestación del lunes fue evidente: donde entonces se reclamaban responsabilidades políticas, hoy predominaban los aplausos y la cordialidad institucional.
Un manifiesto técnico y emocional, pero sin exigencias
El Manifiesto 2025 de Agamama repasó los avances en investigación médica y reclamó más inversión en personal sanitario, una mejor atención a las supervivientes y una apuesta por la prevención. El texto pidió transparencia al SAS “para que una situación tan grave no vuelva a repetirse”, pero sin vincularlo directamente a la actual crisis ni señalar responsables políticos.
Bajo el lema “Juntas somos más fuertes”, la asociación cerró su intervención agradeciendo el apoyo institucional y social recibido. La lectura contó con la presencia de diferentes concejalas y concejales del Ayuntamiento, así como de las delegadas provinciales de Salud, Eva Pajares, y del Gobierno andaluz, Mercedes Colombo, que tampoco realizaron declaraciones sobre el caso.

Representantes del Ayuntamiento de Cádiz y la Junta con el logo Agamama. Foto: Eulogio García
En redes sociales, la presencia de Agamama tras el acto también ha seguido una línea institucional. La primera publicación compartida fue un vídeo de la Junta de Andalucía en el que la asociación figura como colaboradora y se destaca la intervención de la delegada del Gobierno andaluz en Cádiz, Mercedes Colombo, durante la lectura del manifiesto.
Horas más tarde, la entidad difundió otro vídeo con las declaraciones de su coordinadora, Maripaz Ríos, emitidas en las redes de Viva Cádiz, también en formato de colaboración. Ambas publicaciones, de tono informativo y sin alusiones directas a la crisis del cribado, han sido interpretadas por algunas afectadas como una muestra más del perfil moderado de la asociación en plena polémica sanitaria.