
Más olvidos del Ayuntamiento en Cádiz Romana: la estatua de Columela deteriorada en el Parque Genovés
El Consistorio reconoce en su web oficial la figura como un homenaje al agrónomo gaditano, pero la ha tenido sin decorar en la celebración del festival romano

Entre columpios y tabernas del Mercado Romano del Parque Genovés aparecía una estatua con la que podría haberse aprovechado Cádiz Romana para recuperarla. En toda sus facetas: de conocimiento ciudadano y físicamente, con una restauración.
Es una estatua que el propio Ayuntamiento reconoce como de Columela, pero que ha olvidado estos dias de celebración que podría haber servido para ponerla en valor. Sin embargo, lo que mostraba a los visitantes era bien distinto: un pie perdido, grietas en la arenisca, hierbas secas rodeando el pedestal y ninguna decoración floral ni gesto simbólico que la integrara en la celebración.
Tanto que el Ayuntamiento señala que este evento de Orgullos@s de nuestra historia sirve para recuperar esa conciencia colectiva gaditana, no parece haberle afectado al patrimonio. Parece que, a igual que con los barrios, para el Ayuntamiento de Cádiz hay elementos del patrimonio de primera y de segunda.

Estatua de Columela en la plaza Topete, con su fuente engalanada y decorada para el Cádiz Romana. Foto: Eulogio García.
La pieza en sí, de arenisca y datada probablemente en el siglo XVIII o XIX, formaba parte del mobiliario ornamental de la ciudad y llegó al parque tras pasar por distintos emplazamientos. Su autor es desconocido, pero su deterioro evidente.
Y, a todo esto, el Ayuntamiento reconoce en su web oficial que se trata de una alegoría de Lucio Junio Moderato Columela, el agrónomo romano nacido en Cádiz en el año 4 d.C., considerado uno de los principales tratadistas de agricultura de la Antigüedad. En la ficha municipal de la web de las zonas verdes de la ciudad se afirma que la escultura representa a Columela “con uno de sus tratados en la mano y apoyado sobre el tronco de un árbol”.

Captura de pantalla de la web municipal sobre espacios verdes en la ciudad.
Algunos historiadores plantean dudas: por los racimos de uvas, podría tratarse de una alegoría de Baco, aunque la figura carece de elementos habituales del dios romano, como la corona de laurel o la copa de vino. Otros creen que podría ser una representación genérica de la Naturaleza. Pero la versión oficial del propio Consistorio es clara: es Columela.
La paradoja es evidente. El mismo Ayuntamiento que engalanó con flores las estatuas de Balbo en su rotonda y de Columela en la fuente de la plaza Topete durante el festival romano de la semana pasada, ha olvidado en cambio la que él mismo reconoce como homenaje al agrónomo gaditano en el Parque Genovés.

Balbo, en su florida rotonda durante el Cádiz Romana. Foto: Eulogio García.
Un descuido más, aunque llamativo al estar ubicada en el centro de la zona de restauración del Mercado Romano, a escasos metros del bullicio de cientos de visitantes.
Cádiz Romana se presentó como una oportunidad para reivindicar la historia de la ciudad y rescatar del olvido a personajes clave de la antigua Gades. Pero en este caso, el olvido se ha impuesto.
La estatua de Columela, deteriorada y sin restaurar, ha pasado desapercibida durante el festival, perdiéndose una ocasión inmejorable para devolverle dignidad y presencia a un símbolo que, según el propio Ayuntamiento, forma parte del patrimonio verde y cultural de la ciudad.
Mientras el alcalde hace balance de “un festival que ha devuelto la historia romana a las calles de Cádiz”, en el Parque Genovés la estatua de Columela —que el propio Ayuntamiento identifica como el escritor agrónomo más célebre de Gades— seguía (y sigue) rodeada de hierbajos, con el pie izquierdo desaparecido y sin una sola flor que la engalanara.
Una paradoja que resume bien lo que ha sido esta edición: brillo en los grandes escenarios, pero también olvidos pequeños (o no tan pequeños) que chirrían.