
"Retire las banderas": el IES Columela de Cádiz recibe amenazas por su apoyo a Palestina y Ucrania
Un anónimo dirigido al instituto exige retirar las banderas, advierte con denuncias e invoca a VOX como herramienta de presión política

El IES Columela de Cádiz ha denunciado que ha recibido un anónimo con diferentes amenazas por exhibir en su fachada las banderas de Palestina y Ucrania, en condena al genocidio que sufre el primero y la invasión del segundo.
Desde finales del curso pasado, en la fachada del instituto ondean las banderas de Palestina y Ucrania, como gesto de apoyo a los pueblos que sufren las consecuencias de la guerra. Recientemente, a estas enseñas se sumaron varias pancartas de denuncia por el genocidio cometido contra la población palestina. Fue entonces cuando llegó el escrito intimidatorio.
En abril, el instituto colocó en su fachada las banderas de Palestina y Ucrania, un gesto que pronto recibió un revés institucional: una resolución recordó que la medida incumplía la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía 1163/2020, que prohíbe símbolos no oficiales en edificios públicos.
Para acatar la norma sin renunciar a su mensaje, el centro optó por reubicar ambas enseñas en el interior del edificio, decisión que en el presente curso se reforzó con la colocación de pancartas de denuncia contra la guerra y la ocupación.
El documento, remitido de forma anónima al instituto, no deja lugar a dudas. “Retire las banderas”, exige en su encabezado. A partir de ahí, el texto acusa al profesorado de actuar fuera de sus competencias: “Su obligación es enseñar, no adoctrinar a los alumnos”. El autor insiste en que la exhibición de símbolos políticos es “una extralimitación inadmisible” y advierte de que, si no se corrige, podrían iniciarse “denuncias y acciones legales” contra el centro.

La comunidad educativa IES Columela con la bandera de Palestina tras las amenazas. Foto: Facebook.
La amenaza va más allá de lo jurídico. En un párrafo se menciona expresamente a Vox como un instrumento dispuesto a actuar contra el instituto en caso de que persistan en su postura. El anónimo insiste en que el Columela “se extralimita en sus funciones educativas” y señala que el centro debería limitarse a impartir las materias regladas “sin contaminar con ideología”.

Carta anómica publicada por el IES Columela en sus redes. Foto: Facebook.
La respuesta del IES Columela: "No cederemos al miedo"
Lejos de intimidarse, la comunidad educativa del IES Columela ha respondido con un comunicado público en el que defiende con firmeza su posición. “No cederemos al miedo ni a las amenazas anónimas”, subraya el escrito de la dirección.
El instituto recuerda que la educación es inseparable de los valores democráticos: “Nuestra tarea no es solo transmitir contenidos académicos, sino también formar en pensamiento crítico, en solidaridad y en defensa de los derechos humanos”. En el mismo texto, se recalca que las banderas y pancartas son una expresión legítima del compromiso social del centro: “La enseñanza no puede ser cómplice del silencio”.
La respuesta también lanza un mensaje a quienes buscan intimidar: “La presión y el miedo no tienen cabida en un espacio educativo”. Con estas palabras, el profesorado y el personal del Columela dejan claro que no retirarán los símbolos solidarios de su fachada.

Comunicado en redes del IES Columela tras recibir el anónimo. Foto: Facebook.
Un instituto con tradición de compromiso
El IES Columela es conocido en Cádiz por iniciativas solidarias y su implicación en causas sociales. Durante años ha impulsado campañas contra la violencia de género, actividades de apoyo a la igualdad y pronunciamientos contra la guerra. La presencia de las banderas de Ucrania y Palestina, ahora reforzada con pancartas de denuncia, forma parte de esa tradición.

Pancarta contra el genocidio en el interior del IES Columela.
La dirección insiste en que su compromiso no es partidista, sino humano: “Estamos con los pueblos que sufren la guerra, la ocupación y la violencia”. Y recalca que, frente a las amenazas recibidas, la respuesta seguirá siendo la misma: mantener los símbolos en la fachada y seguir educando desde los valores.