
La clave para ahorrar hasta un 20% de combustible está en tus neumáticos
La OCU recuerda que mal estado de los neumáticos es uno de los motivos de rechazo más habituales en la ITV

Los neumáticos el único punto de contacto entre el coche y el asfalto así que de su estado y calidad dependen la distancia de frenado, la estabilidad en curva y el control sobre mojado.
Elegir bien no es un capricho ya que es invertir en seguridad y también en eficiencia, porque la resistencia a la rodadura puede explicar hasta un 20% del consumo de combustible.
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha recordado, además, que el mal estado de las gomas —como puede ser el desgaste excesivo o dibujo por debajo del mínimo legal— es uno de los motivos de rechazo más habituales en la ITV.
Cómo mide la OCU el rendimiento
Lejos de opiniones puntuales, la OCU evalúa a las marcas con pruebas muy repetidas durante los últimos cinco años. Analiza agarre en seco y mojado, resistencia al desgaste, eficiencia (que está muy relacionada con la rodadura), rumorosidad y hasta el contenido de HAP (hidrocarburos aromáticos policíclicos).
Con esas métricas otorga una nota sobre 100 y clasifica en tres grupos como son “buenos” (más de 60 puntos), “aceptables” (50–60) y “no recomendables” (menos de 50).
En los ensayos se incluyen varias frenadas en distintas velocidades, pruebas de aquaplaning, también de mediciones de consumo y simulaciones de larga durabilidad para replicar miles de kilómetros reales.
Con datos consolidados del último lustro, solo cuatro fabricantes superan la barrera de los 60 puntos y logran la máxima distinción de la OCU como son fabricantes tales como Continental (64), Bridgestone (62), Goodyear (62) y Dunlop (61).
Tras ellos, un pelotón amplio se reparte entre los 50 y los 59 puntos —con otros fabricantes de la talle de Pirelli (59), Michelin (58), Vredestein (57), Toyo y Kumho (56), Nokian (55), Falken y Esa Tecar (54), Hankook (52), Semperit (51), BFGoodrich, Barum, Giti, Apollo, Nexen, Sava, Maxxis y Fulda (alrededor de 49–50), Uniroyal (47), Yokohama (44), Kleber (39), Laufenn (38) y GT Radial (35)—.
Estar en “aceptable” no convierte a una goma en mala aunque si indica que, de media, algún apartado queda por detrás de las mejores. Dentro de cada marca hay modelos que pueden rendir por encima o por debajo de esa media, por lo que conviene mirar la referencia concreta.
Más allá del logotipo del flanco, la etiqueta europea es una brújula útil puesto que califica la eficiencia (A–G), el agarre en mojado y el ruido de rodadura.
Un ejemplo práctico es un neumático con clase A en eficiencia, como el Goodyear EfficientGrip Performance en determinadas medidas, ahorrará más combustible que otro similar con clase B, como el Dunlop BluResponse. Así que comparar esta etiqueta antes de comprar evita sorpresas y ayuda a equilibrar seguridad y coste por kilómetro.
La OCU también preguntó a más de 52.000 conductores europeos cuántos kilómetros recorrieron antes del cambio. El podio de kilometraje real lo lidera Yokohama (44.634 km), estando seguida muy de cerca por Michelin (44.187 km); después aparecen Vredestein (42.973 km), Toyo (42.406 km) y Continental (41.943 km).
Este dato ilustra una realidad y es que una marca que no encabeza el ranking global puede ser sobresaliente en durabilidad.
Para quien devora kilómetros con su automóvil, ese factor puede pesar tanto como el agarre puro. Eso sí, el estilo de conducción, el mantenimiento y el tipo de vía influyen mucho en la vida útil.
Calidad-precio: opciones sensatas sin pagar de más
El precio alto no garantiza automáticamente el mejor neumático ni mucho menos. Marcas como Hankook (52) o Falken (54) han mejorado prestaciones y ofrecen una relación calidad-precio competitiva.
También Kumho (56) destaca por su equilibrio general. La cuenta que importa es el coste por kilómetro y el precio de compra, kilómetros esperados y posible ahorro de combustible por baja resistencia a la rodadura.
Consejos prácticos para acertar
Medidas homologadas que respeta las dimensiones y códigos de carga/velocidad autorizados.
No mezclar en el mismo eje pues ambos neumáticos deben ser iguales; además entre ejes pueden variar si están permitidos.
Uso y clima ya que en una ciudad, autopista, lluvia frecuente o nieve orientan la elección (verano, invierno o all season).
Presión y mantenimiento ya que hay que revisarla mensualmente y antes de viajes para asegurar agarre y desgaste uniforme.
Fecha de fabricación (DOT), que se comprueba semana y año.
Nitrógeno. para un uso normal no compensa el sobrecoste.
Límites legales y que cambia a 1,6 mm de dibujo como máximo; por seguridad, la DGT recomienda hacerlo alrededor de 3 mm.
La conclusión es que no existe el “mejor” universal, sino el más adecuado para tu coche, tu ruta y tu presupuesto. Si priorizas rendimiento global, Continental, Bridgestone, Goodyear y Dunlop son apuesta segura; si realizas muchos kilómetros, valora la durabilidad de Michelin o Yokohama; si buscas ahorrar pero sin renunciar a seguridad, mira Hankook, Falken o Kumho. Y siempre, etiqueta en mano.