Oración contra la rebeldía

Oración para un hijo rebelde y pedir ayuda divina

Aurora Castro Diaz
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La plegaria para un hijo rebelde es una de las oraciones más poderosas que un padre puede hacer. Es una llamada a la gracia divina para que guíe a un hijo que ha tomado un camino que no es el correcto. Es una oración que viene del corazón, llena de amor y preocupación por el bienestar del hijo.

La plegaria para un hijo rebelde es una de las oraciones más difíciles de hacer. Es difícil porque implica reconocer que el hijo no está siguiendo el camino que se le ha enseñado y que no está actuando de acuerdo con los valores que se le han transmitido.

Es difícil porque implica aceptar que el hijo tiene una voluntad propia y que no siempre seguirá el camino que se le ha trazado.

Pero a pesar de lo difícil que es, la plegaria para un hijo rebelde es una de las oraciones más importantes que un padre puede hacer. Es importante porque es una forma de pedir ayuda divina para guiar al hijo por el camino correcto.

Esta oración es importante pues muestra la preocupación por el bienestar del hijo. Es importante porque es una forma de pedir perdón por los errores que se han cometido como padres y de buscar la reconciliación con el hijo.

La plegaria para un hijo rebelde debe comenzar con una reflexión sobre el amor que se siente por el hijo. Es importante recordar que el amor de un padre por un hijo es incondicional y que no importa cuáles sean las acciones del hijo, ese amor nunca disminuirá.

Es importante recordar que el amor de un padre por un hijo es un reflejo del mismo amor que siente Dios por sus hijos.

La plegaria dice: “Dios que todo lo puedes y que nos amparas desde las Alturas, ayúdame en este gran problema que tengo con mi hijo [diga el nombre]. Haz que recapacite, que se replantee su vida y que tome el buen camino para que pueda ser alguien de provecho el día de mañana.

Dios que todo lo puedes haz que entre en razón, que tome decisiones correctas, que abrace la fe y la bondad, que sepa diferencia lo bueno de lo malo, que su rebeldía se haga experiencia y sepa que es lo que más le conviene dentro del camino del bien.

Mi hijo rebelde, descarriado, no entra en razón, no sé qué hacer ya, te imploro que me ayudes, que con tu fuerza todopoderosa cambie y que se haga una persona de bien y de provecho.

No sé a quién recurrir ya, lo he intentado todo, he hablado con él/ella, pero no atiende a razones. Te ruego que tu fuerza le guie y le haga ver el bien, que corrija su rebeldía y sea una buena persona. Amén”.

La plegaria para un hijo rebelde también debe incluir una reflexión sobre los errores que se han cometido como padres por que también se cometen y cuesta trabajo de reconocer, pero es un principio básico de honestidad.

No se puede pretender que sea todo como se quiere, no somos perfectos y hay que aceptar que hemos cometido errores en la educación y crianza del hijo. Es importante pedir perdón por esos errores y buscar la reconciliación con el hijo.

Una vez que se ha reflexionado sobre el amor que se siente por el hijo y sobre los errores que se han cometido como padres, se puede comenzar la plegaria propiamente dicha. La plegaria para un hijo rebelde debe ser una oración sincera, llena de emociones y sentimientos.

La plegaria para un hijo rebelde debe comenzar con una petición de ayuda divina. Es importante pedir a Dios que guíe al hijo por el camino correcto, que lo proteja de los peligros y que le brinde la sabiduría y la fuerza necesarias para tomar las decisiones correctas.

Es importante también pedir a Dios que ilumine el corazón del hijo y que lo ayude a comprender que el camino que ha elegido no es el correcto. Es importante pedir a Dios que toque su corazón y que le permita ver la verdad y la belleza que hay en el camino correcto.

La plegaria para un hijo rebelde debe incluir también una petición de perdón por los errores que se han cometido como padres. Es importante pedir perdón.

Oraciones milagrosas para los hijos rebeldes

Muchas veces la relación padre/hijo-a o madre/hijo-a puede ser compleja y conflictiva,  sobre todo cuando el hijo/a se desvía del camino que se esperaba para él.

Es natural que los padres quieran siempre aquello que es mejor y que se sientan angustiados cuando ven que su hijo está tomando decisiones que no están de acuerdo con sus valores y principios.

En estos momentos difíciles, una de las herramientas más poderosas que tienen los padres es la oración. La plegaria es una forma de pedir ayuda y la guía para uno mismo y para los demás, incluyendo a los hijos rebeldes.

El rezo para un hijo rebelde debe comenzar con una reflexión sobre el amor incondicional que se siente por el hijo. Es importante recordar que el amor de los padres por sus hijos es incondicional y que no importa cuáles sean las acciones del hijo, ese amor nunca disminuirá.

El rezo para un hijo rebelde también debe incluir una reflexión sobre los errores que se han cometido como padres. Es importante aceptar que no somos perfectos y que hemos cometido errores en la educación y crianza del hijo. Es importante pedir perdón por esos errores y buscar la reconciliación con el hijo.

Hay dos oraciones muy poderosas y cortas que tienen también un gran efecto sobre la persona rebelde y que puede funcionar muy bien en esa ayuda divina, en esa llamada a Dios que se hace para que te auxilie, dicen:

“Dios que todo lo puedes haz que mi hijo/a se aparte de esa rebeldía que le siega y tome el buen camino para que obre adecuadamente y tenga una conducta correcta en la vida y con otras personas.

Qué no se deje llevar por las tentaciones que aparecen en el camino, que siempre se oriente a hacer el bien y aquello que es correcto.

Que su futuro sea bueno y que tenga prosperidad y felicidad. Que el mal no atraviese su corazón y que sus principios sean siempre puros y honestos.

Prometo siempre acordarme de este gran favor que me hacéis y rezar siempre como agradecimiento. Amén”.

La segunda oración dice: “Igual que Jesucristo fue a buscar a la oveja perdida hoy yo te imploro que busques a mi hijo en su rebeldía y que le orientes a aquello que es el buen camino.

Que su desobediencia se transforme en voluntad y que esa voluntad se haga fuerte para ayudarle a alcanzar aquello que quiere sin apartarse del camino de Dios, que esa rebeldía de paso a una forma de ser más serena, más templada, que mire más por los demás y por su futuro y nunca se aparte del buen camino. Amén”.

Son oraciones poderosas que ayudan a la persona y que hacen que se pueda reorientar al hijo rebelde hacia donde está el Bien, la Verdad y la honestidad.