
Omnia Pietas: la Virgen de la Piedad preside la exposición que une arte y fe en el Museo Naval de San Fernando
Omnia Pietas se presenta como un homenaje a los cincuenta años de la dolorosa, obra del escultor sevillano Luis Álvarez Duarte

El Museo Naval de San Fernando abrirá sus puertas a un evento inédito en sus instalaciones como es una exposición de carácter cofrade organizada por la Hermandad de la Misericordia.
Bajo el título Omnia Pietas, la muestra que se inaugurará el próximo lunes día 22 de septiembre permanecerá abierta hasta el sábado 4 de octubre en la sala de exposiciones temporales de la antigua Capitanía General.
La propuesta supone un acontecimiento singular, al tratarse de la primera vez que el museo acoge una iniciativa relacionada de forma directa al mundo de las hermandades.
Vie a coincidir con una efeméride muy significativa para la corporación del Jueves Santo isleño como supone el cincuentenario de la bendición de la imagen de María Santísima de la Piedad, una devoción que ha marcado de forma profunda la Historia y la identidad de esta cofradía.
La junta de gobierno de la hermandad ha explicado que el título de la muestra no es casualidad pues Omnia Pietas se presenta como un homenaje a los cincuenta años de la dolorosa, obra del escultor sevillano Luis Álvarez Duarte.
Duarte ocupa un lugar destacado en la historia de la imaginería procesional andaluza y la llegada de esta imagen a la hermandad en 1974 supuso un antes y un después, tanto en lo artístico como en lo devocional, convirtiéndose en una referencia para generaciones de cofrades y fieles.
El recorrido expositivo se ha planteado como un viaje por distintas áreas temáticas que mostrarán desde el proceso de encargo y hechura de la talla hasta el excelso patrimonio atesorado durante estas cinco décadas.
Entre las piezas que podrán contemplarse figuran parte del ajuar de la Virgen, documentos gráficos de importancia y objetos relacionados con su culto, además de materiales que ponen de relieve la evolución de la devoción mariana en la ciudad.
Más de un aniversario en un solo relato en San Fernando
Aunque el eje principal es el aniversario de la Piedad, la exposición comprende también otros dos acontecimientos que este año cumplen medio siglo.
Ejemplo de ello es la proclamación de la hermandad como sacramental y la fundación de su grupo joven. Estos hechos se suman al discurso expositivo para ofrecer una visión más amplia del recorrido histórico de la corporación, que se ha afianzado como una de las más activas de San Fernando.
De esta forma, Omnia Pietas no se limita a recordar un momento puntual, sino que conecta con distintos capítulos de la vida de la hermandad, mostrando cómo la fe, la tradición y la juventud han sido pilares esenciales en su desarrollo.
La muestra dedica además un espacio a subrayar el estrecho vínculo que la hermandad mantiene con la Orden del Carmen Descalzo, vinculación que se ha intensificado en los últimos años a través de la causa de beatificación de la Hermanita Cristina.
Esta conexión, que une espiritualidad y compromiso social, se verá igualmente reflejada en los contenidos expositivos.
El proyecto cuenta con la dirección del comisario Rafael J. Ríos Delgado, licenciado y doctorando en Historia del Arte por la Universidad de Sevilla, que ha tenido una importante labor en la selección y organización del material para ofrecer un relato que sea coherente y atractivo al visitante.
La exposición se hace posible gracias a la colaboración de la Armada, que ha cedido estas instalaciones del Museo Naval, aportando así un marco histórico y patrimonial de gran relevancia.
La Hermandad de la Misericordia ha destacado que Omnia Pietas no está concebida solamente para los devotos de la Piedad, sino que busca abrirse a toda la ciudad y a quienes visiten San Fernando en estas fechas.
Su carácter cultural y su valor artístico convierten la muestra en un acontecimiento de gran interés para estudiosos, aficionados al arte sacro y público general.
Durante las casi dos semanas que permanecerá abierta, la exposición aspira a ser punto de encuentro así como espacio de memoria y ocasión para redescubrir la riqueza patrimonial y espiritual de una hermandad que, medio siglo después, sigue escribiendo nuevas páginas en la historia de la Semana Santa isleña.