
El origen y verdadera historia del Ratón Pérez
El Ratón Pérez sale cada noche con la misión de visitar a los niños que habían dejado un diente bajo la almohada

Cuando un niño pierde un diente de leche en España, no espera la visita del hada de los dientes como pudiera ocurrir en otros muchos países. En su lugar, un pequeño roedor se ha ganado el cariño de generaciones como es el mítico el Ratón Pérez.
Este personaje, que mezcla ternura y fantasía, tiene una historia sorprendente que hunde sus raíces en la literatura del siglo XIX y que aún hoy emociona a familias enteras.
El origen del Ratón Pérez se remonta al año 1894, cuando el escritor y jesuita Luis Coloma recibió un encargo muy especial. Se trataba del joven Alfonso XIII, entonces un niño de apenas ocho años, había perdido un diente, y la reina regente María Cristina pidió a Coloma que escribiera un cuento a fin de suavizar el momento.
El resultado fue una entrañable narración en la que el protagonista era un pequeño ratón que vivía en una caja de galletas dentro de la confitería Prats, en el corazón de Madrid.
Desde allí, el Ratón Pérez salía cada noche con la misión de visitar a los niños que habían dejado un diente bajo la almohada, llevándoselo a cambio de un obsequio. La obra fue tan bien recibida que trascendió los muros de palacio logrando convertirse en una de las tradiciones infantiles más queridas en España.
La magia de un ratón que viaja por los hogares
A diferencia del hada de los dientes anglosajona, el Ratón Pérez tiene un trasfondo literario concreto así como una personalidad más cercana. Representa la astucia, la humildad y el ingenio de los pequeños, igualmente la capacidad de convertir un momento cotidiano —como es la caída de un diente— en una experiencia deseada -por el regalo- y mágica.
Cada vez que un niño deja su diente de leche bajo la almohada, espera con ilusión el pequeño regalo que el ratoncito dejará a cambio.
En muchos hogares españoles, esta tradición se vive con auténtico entusiasmo y son los padres lo que mantienen vivo este gran "misterio" para los niños, mientras los más pequeños despiertan al día siguiente con una sonrisa y un recuerdo imborrable.
Un símbolo de la infancia en España
Más de un siglo después de su creación, el Ratón Pérez sigue teniendo un lugar de enorme privilegiado en la cultura popular. En Madrid, por ejemplo, se puede visitar la llamada “Casa Museo del Ratón Pérez”, ubicada en el mismo edificio donde la tradición señala que vivía el personaje creado por Coloma.
Este espacio viene a combinar Historia, literatura y fantasía, y se ha convertido en un atractivo turístico para familias y curiosos.
Este ratonezco personaje ha inspirado cuentos, ilustraciones y adaptaciones modernas, manteniéndose muy vigente en un mundo en el que las tradiciones infantiles a menudo se transforman o desaparecen.
En colegios y hogares, el Ratón Pérez sigue siendo motivo de conversación y de ilusión para los más pequeños, afianzándose como un puente entre generaciones.
El Ratón Pérez no solo es un personaje de ficción se trata de un gran símbolo del valor de las pequeñas historias que se convierten en patrimonio cultural. La tradición de dejar el diente bajo la almohada refleja cómo la literatura puede dar forma a rituales familiares y llegar a ser parte de la identidad de un país.
En España, millones de niños han vivido este rito de paso, compartiendo con sus padres y abuelos la emoción de esperar al diminuto y simpático visitante nocturno. La historia escrita para un rey niño en el siglo XIX sigue viva ahora en el siglo XXI, demostrando que la magia y la imaginación no tienen fecha de caducidad.