
‘Los poderosos’: El ADN carnavalero de Manuel Cornejo y su respeto al COAC
El joven autor sigue consolidando su sello en el COAC este año con una comparsa que combina tradición, garra y un profundo respeto por el Falla

La comparsa Los poderosos de Manuel Cornejo debutó en el COAC 2025 con la responsabilidad de seguir consolidando su sello gaditano y demostrar que lo suyo no es casualidad. Con tan solo tres comparsas a sus espaldas, Cornejo ya se ha hecho un nombre dentro del concurso, tras alcanzar la final en su primer año.
Este año, se ha estrenado fuerte, con letras reivindicativas y que han tenido mucho eco, como el pasodoble en el que denuncia el genociadio en Palestina.
El grupo se cambió en el Hogar del Pensionista de la Calle la Rosa, un lugar donde el ambiente era casi una fiesta previa. Familia, amigos, muchas risas... y tres cajas de dulces, porque si algo se va a necesitar en el concurso más largo de la historia es energía. Entre preparativos y últimos repasos, Manuel Cornejo atendió a Cádiz Directo, para hablar de forma de entender el Carnaval, de la importancia de disfrutar lo que hace y, sobre todo, del respeto que siente por el Falla.
Y es que Manuel Cornejo reconoce que el Carnaval está en su ADN. Hijo de Manuel Cornejo, Don Adolfo en la mítica chirigota del Love, lo ha mamado desde pequeño y lo vive como algo natural. “Esto es hacer Carnaval porque hay quien va al gimnasio, y a nosotros nos gusta esto”, comenta entre risas.
Pero lo que parece un chiste es una realidad. La pasión por la fiesta es algo que lleva dentro, aunque a veces se plantee alternativas. “Hoy llevo todo el día pensando que debería apuntarme a punto de cruz, que a mi padre le gustaba le punto de cruz”, bromea. Pero la llamada del Carnaval siempre pesa más y ahí está, con su tercera comparsa, más convencido que nunca de que este es su camino.
El respeto al Concurso y el peso de la exposición
Aunque su nombre ha sonado en los últimos años, Cornejo tiene claro que lo importante es no dejarse llevar por la presión. “Yo intento quitarle hierro al asunto, por mí, por ellos y por todo mi grupo”, explica. Una de sus estrategias ha sido alejarse de las redes sociales durante el concurso. “Me las desinstalé al empezar el COAC. La gente lo dice con cariño, pero te pones a leer y ves: ‘esta comparsa, esta comparsa, esta comparsa…’ y al final te vuelves loco”, confiesa.
Para él, lo esencial es disfrutar del proceso sin obsesionarse con el resultado. “Los únicos que vamos a convivir con la comparsa hasta que hagamos otra, somos nosotros. Me la voy a comer un año entero, así que lo primero es que nos guste a nosotros”, afirma. “Si luego gusta al jurado, mejor, porque esto es un concurso. Pero hay que hacer las cosas de dentro hacia fuera, no al revés”.
‘Los poderosos’: una fantasía gaditana
La comparsa de este año mantiene su esencia gaditana, pero con un giro más combativo. “Es una fantasía, ‘Los poderosos’ es una fantasía que solo se va a cumplir si los gaditanos algún día decidimos”, explica. Comparada con su anterior agrupación, ‘La ley de Cádiz’, Cornejo señala un cambio de tono: “Venimos de una comparsa muy optimista y vitalista. Esta también tiene un mensaje optimista, pero con más garra, dicho de otra manera, enfocado de otra forma”.
Para él, es parte del proceso de evolución natural que va viviendo como autor. “Intentamos que cada vez sea una comparsa más madura. Esta es la tercera, cuando lleguemos a la décima ya será otra cosa, pero de momento estamos en este punto y seguimos creciendo”, comenta con ilusión.
El Falla, un templo que se respeta
Si algo ha dejado claro Manuel Cornejo es el respeto absoluto que siente por el concurso y por el Gran Teatro Falla. “Hay que ir con respeto, a la gente, al público, al teatro, a la fiesta en sí”, afirma con convicción. “Aunque lo haya vivido desde pequeño, sigo viéndolo como algo grandísimo, seguido por mucha gente y con un valor incalculable”.
‘Los poderosos’ ha llegado al COAC 2025 con fuerza, con un grupo comprometido y con un autor que sigue demostrando que su nombre no está aquí por casualidad. El respeto por la tradición, el amor por el Carnaval y las ganas de seguir creciendo siguen siendo su mejor carta de presentación.