El metal vuelve a la huelga en Cádiz con el recuerdo de 2021 muy presente
El sector arranca este miércoles (si no hay acuerdo de última hora) un paro de 48 horas que puede tornarse indefinido
Tres años y medio después, vuelve la huelga del metal a la provincia de Cádiz. El conflicto se reabre con muchos de los ingredientes que marcaron las protestas de noviembre de 2021: bloqueo en la negociación del convenio, movilizaciones en los astilleros, presión desde la industria auxiliar y un clima de crispación que ya ha empezado a sentirse en la calle.
Este miércoles 18 de junio comienza oficialmente el paro de 48 horas convocado por CCOO y UGT, con la amenaza de convertirse en indefinido a partir del día 23 si no hay avances. Y, como entonces, hay miedo, esperanza y tensión a partes iguales.
La huelga de 2021 duró 9 días. Fue una protesta que dejó imágenes que ya forman parte de la memoria colectiva de Cádiz: la tanqueta de la Policía Nacional en la barriada del Río San Pedro en Puerto Real entre cargas, fuego y barricadas; y el entonces alcalde de Cádiz, José María González Kichi, con un altavoz en mano, arengando a los trabajadores en plena Cuesta de las Calesas de Cádiz: “Ha habido que meter fuego para que en España miren al metal de Cádiz”, gritaba. Aquellas jornadas acabaron con detenciones, juicios, fuertes enfrentamientos y una victoria parcial para los trabajadores. Hoy, ese recuerdo flota en el ambiente.
La huelga de 2021 dejó muchas imágenes que siguen en la memoria colectiva de Cádiz. Foto: Eulogio García.
La nueva huelga tiene un origen muy similar. El convenio colectivo del sector está caducado desde diciembre de 2023, y tras más de una docena de reuniones entre patronal y sindicatos, no ha habido acuerdo. La última, celebrada este lunes en el Sercla, terminó casi a las diez de la noche sin resultados. Ayer sindicatos y patronal siguieron intentando cerrar el acuerdo, pero a media tarde se dio la negociación en punto muerto y se siguió con adelante con la convocatoria.
Las diferencias entre las partes se mantienen en varios puntos: la eliminación de la doble escala salarial, la regulación de los contratos fijos discontinuos, las coberturas por incapacidad temporal y la aplicación retroactiva del IPC desde el 1 de enero. Además, la patronal ha propuesto un contrato de nueva creación con condiciones por debajo de las actuales tablas salariales, lo que ha tensado aún más la negociación.
La calle, de nuevo, se anticipó al calendario de protestas. Este lunes, los trabajadores de las empresas auxiliares de Navantia Cádiz se plantaron ante el intento de la dirección para facilitar la de salida del crucero Carnival Liberty, impidiendo su traslado del dique al muelle como forma de presión ante el inminente inicio de la huelga. Además, cortaron el tráfico en la Carretera Industrial. No es la primera acción: ya el pasado 9 de junio protagonizaron un paro simbólico frente a la Dirección del astillero. La estrategia sindical se ha ido endureciendo a medida que se acumulaban las reuniones fallidas.
Ante este escenario, la Subdelegación del Gobierno ha activado un dispositivo de seguridad especial en los principales focos industriales de la provincia. La subdelegada, Blanca Flores, ha apelado a la prudencia, pero ha recordado que se reforzará la presencia policial para “garantizar la movilidad y la seguridad”. El temor a que se repitan los disturbios de 2021 es real, aunque las autoridades confían en que las protestas se desarrollen sin incidentes graves. En el corte de la Carretera Industrial hubo tensión, mucha tensión.
Importante presencia policial en el corte de este martes de la Carretera Industrial, que se ve al fondo. Foto: Eulogio García.
Pero el nervio del conflicto ya está activado. Más de 24.000 personas están llamadas a participar en la huelga, especialmente en la Bahía de Cádiz y el Campo de Gibraltar. El sector del metal vuelve al centro del debate, no solo por la fuerza de sus protestas, sino por lo que representa: precariedad en las subcontratas, falta de respuesta patronal y una estructura productiva que sigue tensionada entre carga de trabajo y condiciones laborales desiguales. Tres años y medio que prácticamente ha estado el sector y sus problemas fuera del foco.
Este miércoles, con el inicio oficial de la huelga, muchas miradas volverán a Cádiz. Y muchas lo harán recordando las imágenes que hace tres años y medio colocaron a la provincia en el centro de la política y los telediarios. La tanqueta. Las barricadas. El altavoz de Kichi. El fuego. El metal. La lucha obrera. "Si esto no se arregla...". Parece que no se ha arreglado.